En nombre del Partido Popular de Melilla, la diputada local Fadela Mohatar, hizo un llamamiento al Gobierno tripartito de la Ciudad Autónoma y a la Delegación del Gobierno para que “dejen de dar esa espantosa imagen de desunión y de enfrentamiento, porque estamos pasando por una de las situaciones más graves de nuestra historia reciente y la ciudadanía quiere unión, liderazgo y contundencia sin titubeos en las medidas que se adopten”. A través de un audio, Fadela Mohatar expresó la “sorpresa y preocupación” del PP porque consideran que “seguimos como al principio de la alarma sanitaria”, en el sentido de que no se da la necesaria coordinación entre instituciones. Recordó que, desde los primeros días de confinamiento, el PP expresó su “voluntad de colaboración máxima” con la Ciudad Autónoma y la Delegación del Gobierno, con propuestas socioeconómicas, así como “nuestra participación y aquiescencia para que se tomaran las medidas de control y sanitarias que fueran necesarias”.
Basta ya
Asegura que los populares han mantenido “una actitud respetuosa con las medidas que se han adoptado y hemos estado también, de forma cautelosa, viendo cómo crecía la presión migratoria con los saltos y cómo se tenían que crear centros de manera excepcional como el de la plaza de toros”. Pero considera que todo esto se prolonga en el tiempo, más allá incluso del estado de alarma.
“Hemos visto que las restricciones no impedían que esa presión migratoria pudiera irse aliviando con la colaboración del resto de las administraciones y ha sido cuando hemos empezado a exigir que se tomaran medidas importantes, porque los contagios empezaban a multiplicarse en una ciudad con una red sanitaria no lo suficientemente robusta para frenar esa propagación descontrolada. Por todo ello hemos empezado a hacer peticiones y exigencias de que se reaccionara de una forma definitiva”, afirmó.
Mohatar lamenta que a la respuesta ha todo ello ha sido ver “a un presidente de la Ciudad que se declara incompetente en cualquier área que se le pregunta, como educación o inmigración, y una Delegación del Gobierno que creemos que ha reaccionado tarde y mal ante la presión tan grave que estábamos padeciendo”. A esto se ha sumado también la existencia de un centro de acogida como el de la Plaza de Toros “sin condiciones mínimas de salubridad que debería haberse aliviado”, los disturbios “preocupantes del CETI” y la muerte de un adolescente en su intento de llegar a la península.
Lo que le preocupa al PP es que “volvemos a encontrarnos con un error de base que tenemos desde el principio de la pandemia, y es que no hay una unidad de acción, de criterio, no hay un liderazgo entre las administraciones que nos tienen que transmitir a la ciudadanía confianza”.
Ejemplo de descoordinación es que Delegación del Gobierno anuncie que va a realizar gestiones ante determinados ministerios y que al día siguiente el presidente de la Ciudad anuncie que va a hacer lo mismo. “Es decir, la unidad de criterio y liderazgo, de voz y acción, son fundamentales para que en una crisis global a la ciudadanía le llegue tranquilidad y tenga confianza en sus instituciones”.
Falta de liderazgo
Pero asegura que “difícilmente esa confianza” puede llegar al ciudadano cuando en los momentos “más duros del confinamiento, hemos tenido que padecer autorizaciones y desautorizaciones en el acopio de materiales, enfrentamientos entre instituciones, desautorizaciones graves y padecer a un presidente solo y sin liderazgo, y una imagen desoladora y rota entre las administraciones”.
Por ese motivo indicó que desde el PP se hace un llamamiento a la Ciudad Autónoma y a la Delegación del Gobierno para que “dejen de dar esa espantosa imagen de desunión, porque estamos pasando por una de las situaciones más graves de nuestra historia reciente y la ciudadanía quiere unión, liderazgo y contundencia sin titubeos en las medidas que se adopten”.
Llamamiento a la responsabilidad
Fadela Mohatar realizó ayer un llamamiento a “la responsabilidad, tanto individual como colectiva de la ciudadanía en estos momentos difíciles que atravesamos”, y aclara que no se pide que “dejemos de hacer nuestra vida, pero sí que sepamos que la pandemia no ha desaparecido ni de lejos, que sigue con nosotros y debemos seguir vigilantes, con una observancia extrema en las medidas de higiene y distanciamiento social” para no poner en riesgo nuestra salud ni la de los que nos rodean.
