La Ciudad Autónoma de Melilla contribuirá a la preparación de los centros educativos públicos y concertados de todas las etapas para un retorno a las aulas seguro en el nuevo curso escolar. Para ello, destinará una partida inicial de 2,5 millones de euros, que podría aumentar hasta el doble o más si fuera necesario.
En rueda de prensa, la consejera de Educación, Cultura, Festejos e Igualdad, Elena Fernández Treviño, explicó que esta cuantía será aportada de los fondos no reembolsables que el Estado ha repartido entre las autonomías por la pandemia del coronavirus, de los cuales a Melilla correspondieron 25 millones de euros.
Con estos fondos, un 10% del total de dichos fondos no reembolsables, el objetivo es conseguir “una presencialidad segura” en las aulas, ya que la consejera recordó que el alumnado tiene el derecho fundamental a la educación y “la educación online no puede sustituir a la presencial”.
El dinero que aportará la Ciudad Autónoma permitirá comprar EPI y material higiénico sanitario, geles hidroalcohólicos, alfombras desinfectantes, papeleras de residuos y botes de spray de superficie, además de “lo que requieran los equipos directivos” de cada centro educativo.
El esfuerzo se centrará en la limpieza y desinfección de los centros, pero también en la dotación de material informático por un valor de 1,7 millones de euros, además de en un aumento de personal para el apoyo del profesorado y la puesta en marcha de las aulas matinales.
Técnicos de Infantil
Para ello, se van a contratar 75 técnicos de Educación Infantil, cifra que aumentará hasta los 120, algo que podría suceder la próxima semana para su incorporación a inicios del curso, ya que el convenio, que se redactó en verano, debe pasar por tres ministerios antes de su retorno a Melilla.
Conciliación
Asimismo, Fernández Treviño avanzó que “no se van a escatimar recursos” en materia de conciliación, que será “de los problemas que exigirán un mayor refuerzo”, si bien pidió a las empresas y a las administraciones “que faciliten al máximo” dicha conciliación de la vida laboral y familiar “sin que eso deba suponer una renuncia”.
Lo que ya se ha comprado
Para comenzar, la consejera explicó que ya se han adquirido 760 garrafas de 5 litros de gel hidroalcohólico, además de otro suministro en marcha, para los dosificadores de pared que se han instalado de un litro de capacidad.
Además, también se han comprado 25.000 mascarillas quirúrgicas y hay otra adquisición iniciada de mascarillas reutilizables; lo que se une a la señalización y cartelería que ya está en elaboración para colocarla en todos los centros.
De igual modo, se han firmado los contratos menores para la compra de guantes, mamparas y papeleras, y se han hecho modificaciones para las desinfecciones que se realizarán por la mañana, con un retén de dos personas más, más los planes de empleo, de modo que los equipos serán de tres personas.
Destinará 1,7 millones para la compra de material tecnológico
Respecto a la compra de material tecnológico, para el que se destinarán 1,7 millones de euros, conllevará un contrato mayor que se tramitará mediante un procedimiento de emergencia, por lo que se estima que en octubre pueda estar ya disponible para su entrega al alumnado.
Según explicó Fernández Treviño, la idea es comprar tarjetas de memoria y de datos, tablets y algún ordenador, tal y como indicó el Ministerio de Educación, herramientas que se repartirá entre los alumnos para que puedan trabajar de forma telemática cuando no les toque turno presencial, en el caso de los de etapas más avanzadas, o en previsión de un posible confinamiento.
La consejera recordó que la Ciudad Autónoma ya llevó a cabo esta iniciativa en el último trimestre del curso anterior entre alumnos de cierre de etapa, para lo que destinó 60.000 euros, si bien ahora la previsión es que dicha cuantía suba hasta 1,7 millones de euros, con el objetivo de paliar la brecha digital, “que es mucha y afecta muchísimo”.
La Administración local también estudiará la posibilidad de firmar algún contrato con las compañías que dotan de red a la ciudad, aunque Fernández Treviño comentó que “no es tan fácil”.
