Según públicó en su edición del pasado miércoles, en su formato digital, el diario lwatan.com, el ministro del Interior marroquí, Abdelwafi Laftif, dio por zanjada la polémica en torno al retorno del comercio atípico (contrabando) en las fronteras de lo que ellos llaman "las ciudades ocupadas" de Ceuta y Melilla, especialmente tras la expectativa creada de abrir la frontera terrestre con la vecina España a través de ambas ciudades. La respuesta del ministro del Interior viene a zanjar definitivamente la cuestión al decidir el no retorno al comercio de contrabando a través de la frontera de Ceuta.
Según el ministro: “No permitiremos, en defensa de la dignidad de la mujer marroquí, que esta situación se repita ya que crea una imagen negativa de ella”.
En respuesta a una pregunta de una de las representantes de los partidos que participó en el encuentro organizado el pasado martes en Rabat, con la comisión encargada de reforzar la representatividad de la mujer en el marco de la preparación de las elecciones de 2021, Laftit recalcó que “Marruecos está dispuesto a buscar todas las alternativas posibles para aquellos que se vieron perjudicados por el cierre de esta frontera que registraba una actividad de contrabando que perjudicaba no solo a la economía local y nacional, sino también a la imagen de la mujer marroquí empleada en una actividad de la que no siempre se beneficia”.
Idéntica situación se da en los tres pasos fronterizos en la ciudad de Melilla, que, a través de las medidas adoptadas, evidencia que el Estado marroquí ha decidido a poner fin a esta situación que ha durado décadas.o
