El presidente de la Ciudad Autónoma, Eduardo de Castro, dejó claro ayer que “no hay nada cerrado” respecto a la posibilidad de utilizar la instalación deportiva de la Ciudad del Fútbol, ubicada en los Altos del Real, como zona de aislamiento de residentes en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) afectados por el coronavirus. De Castro abrió así la posibilidad de que finalmente no se recurra a esta opción, que él mismo había ofrecido 24 horas antes al Gobierno, durante el transcurso de la Conferencia de Presidentes. De este modo, De Castro salió al paso de la inquietud de los vecinos del barrio, el más poblado de Melilla, por los problemas que podría conllevar un centro de acogida para albergar a personas del CETI afectadas por el coronavirus, a escasos metros de una mezquita y de un colegio, lo que ha llevado a la asociación de vecinos a iniciar una recogida de firmas.
“Entendemos la preocupación del barrio y los vecinos”, dijo De Castro tras reunirse con los responsables de la Asociación de Vecinos del Real. Así, apuntó que el temor de este colectivo es volver a sufrir los problemas que ya tuvieron en los primeros días del estado de alarma, cuando los marroquíes bloqueados en Melilla por el cierre de la frontera fueron acogidos en el polideportivo Lázaro Fernández, del que tuvieron que ser desalojados pocos días después.
Dijo que, durante la reunión con los responsables de la asociación, les explicó el problema y les insistió en que se trata de “una medida de urgencia, totalmente excepcional” y que “hay que hacer algo, ya sea en esos terrenos de los Altos del Real o en otros”.
De Castro señaló que la Delegación del Gobierno ha pedido ayuda a la Ciudad Autónoma al no disponer de terrenos propios y ésta, “como no puede ser de otra manera”, prestará terrenos de los que dispone, si bien “ellos deberán gestionar quién va allí por cuestiones de salud pública, cómo se vigila, etc.”, aclaró.
Incidió en que se está optando por esta opción porque tanto a la Ciudad Autónoma como a la Delegación del Gobierno les preocupa “muchísimo” la salud de todos.
Medidas no bien entendidas
“Tenemos que tomar medidas, que muchas veces no son bien entendidas o no son del agrado de los vecinos, y es totalmente lógico, pero esto va a ocurrir en cualquier zona donde haya un núcleo urbano”, aseveró De Castro antes de recordar que “Melilla es lo que es”, una ciudad con poco territorio.
En cualquier caso, aseguró que van a intentar buscar alternativas y que “no hay nada cerrado”, por lo que confió en que entre todos se pueda conseguir que las medidas que se adopten “afecten lo menos posible a los vecinos de este barrio o de cualquier otro”.
