Algunas familias se han puesto en contacto con este Diario para denunciar las aglomeraciones de los estudiantes que se están formando a la entrada, sobre las 8:30 horas, y a la salida, a las 14:30 horas, en el Instituto Rusadir ya que creen que “es un riesgo para la salud de los alumnos, de sus familiares y de Melilla entera”. Exponen que la persona que está en la puerta tomando el control de temperatura “a veces no se da cuenta y se cuelan varios alumnos sin pasar el control, lo que es un peligro”. Además, se quejan de que solo están abriendo una puerta pequeña a la hora de la salida en vez de abrir la grande para que haya más espacio. Un padre de familia explicó a este Diario que varios padres se están quejando de las aglomeraciones de los estudiantes que se forman en el Instituto Rusadir a la hora de la salida, sobre las 14:20 y las 14:30 horas, porque “abren la puerta pequeña en vez de estar abierta de par en par para que haya más espacio”.
“Todo el mundo sabe lo que hacen los alumnos cuando suena la campana del instituto, todos quieren salir corriendo de las aulas a la calle y se aglomeran en la puerta”.
Señaló que el problema está en que los alumnos cuando salen de clase, se aglomeran en la puerta del IES Rusadir sin guardar la distancia de seguridad recomendada por las autoridades sanitarias.
“Hay institutos y colegios de la ciudad que están más alejados, que pienso que están más marginados y que no le dan tanta importancia como a otros centros educativos”, sostuvo.
Por ello, pidió que alguna unidad de la Policía Local pueda acudir a la puerta del instituto algún día para que puedan comprobar lo que está pasando, desde las 8:25 horas de la mañana cuando llegan los alumnos y a las 14:20 horas cuando llega la hora de salida.
También, una de las quejas de los padres es por la persona que está en la entrada midiendo la temperatura a los estudiantes cuando quieren entrar.
“Sabemos que no es guardia jurado ni mucho menos, pero se distrae, entran cuatro y cinco niños sin pasar el control mientras habla con otro alumno, otros dos que se cuelan, según mi punto de vista creo que no lo están haciendo bien”, remarcó.
Además, indicó que esos niños que se cuelan sin ser vistos por la persona que está en la puerta ya no “se les hace el control y están dentro del centro, no hay seguridad, aunque desde la Dirección del centro van a decir que no es así, pero lo he comprobado durante varios días”.
Por la mañana, expuso que algunas veces abren a mitad de la puerta, no la pequeña, y las normas de la Consejería de Salud Publica indican que “la puerta tiene que abrirse, pero esas normas en el instituto dependen del conserje que está en la puerta y cada día van cambiando y abriendo puertas distintas”.
