Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

El juez del ‘caso Dina’ pide al Supremo que investigue a Pablo Iglesias por tres delitos

El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón ha acordado este miércoles elevar una exposición razonada al Tribunal Supremo para solicitar que investigue al vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Podemos, Pablo Iglesias, por los delitos de descubrimiento y revelación de secretos, con agravante de género, daños informáticos y acusación o denuncia falsa y/o simulación del delito en relación a la 'pieza Dina' que se investiga en el marco del conocido como 'caso Villarejo'. Según han informado fuentes jurídicas, el titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, que investiga el robo del teléfono móvil de Bousselham y el posterior uso de los archivos que contenía, remite al alto tribunal la instrucción de la pieza en contra del criterio de la Fiscalía Anticorrupción, quien aún no ha recibido notificación.

La exposición razonada incluye también a la exdirectora de los servicios jurídicos de Podemos y vicepresidenta tercera del Congreso María Gloria Elizo y a los letrados de esta formación Marta Flor Nuñez y Raúl Carballedo, así como a la propia ex asesora Dina Bousselham y Ricardo Dasaferreira, estos dos últimos por falso testimonio.

Fuentes de la formación morada han explicado a Europa Press que "no dan crédito" a la decisión del magistrado cuando precisamente hace unos días la Audiencia Nacional reclamaba a García Castellón que le devuelva la condición de perjudicado a Pablo Iglesias", ante lo cual el juez responde ahora pidiendo al Supremo que se investigue al vicepresidente.

El juez remite la causa al Supremo una vez que concluye la investigación de la pieza 10 del 'caso Tándem' y en su escrito, de 63 páginas, relata los hechos que considera indiciarios de delito para que se investigue a Iglesias, debido a su condición de aforado, el equipo jurídico de Podemos, su exasesora Dina Bousselham y su marido.

Implicación del Vpte.

En caso de que el Tribunal Supremo acepte abrir una causa para investigar la implicación del vicepresidente segundo del Gobierno en estos hechos, le ofrecerá la posibilidad de declarar voluntariamente, tal y como marca la ley para todos los aforados. Si Iglesias rechazara tal posibilidad, el magistrado al que se le designe la instrucción podrá proponer a la Sala de lo Penal del alto tribunal que curse el suplicatorio al Congreso de los Diputados para poder interrogarle formalmente.

El juez de la Audiencia Nacional señala que Iglesias recibió en buen estado del periodista Antonio Asensio, el 20 de enero de 2016, la tarjeta de memoria original mini SD procedente del teléfono de Dina Bousselham, en la que comprobó que almacenaba archivos personales y de carácter muy íntimo de aquella.

Destaca que pese a que Bousselham e Iglesias eran personas cercanas, éste se guardó la tarjeta durante un tiempo sin informar a la que fuera su asesora. El juez cree que esta acción puede vincularse al conocimiento que líder de Podemos tuvo al observar las capturas de pantalla que la asesora guardaba de conversaciones de grupos de mensajería en los que aparecía el aforado.

El juez cree que Iglesias intentó echar la culpa al PP de la desaparición del teléfono de Dina para sacar rédito electoral

Otro punto significativo para el magistrado es el hecho de que Iglesias devolviera a la que fuera su asesora la tarjeta inoperativa y, advierte de que si bien no se ha podido determinar la fecha de la devolución, indica, en todo caso, que debió de ser antes del 23 de agosto de 2017. "Se sabe que cuando se devuelve la tarjeta está inservible para su funcionamiento", afirma el magistrado. Asimismo, destaca que durante en julio de 2016 un medio de comunicación publicó durante varios días noticias acompañadas de las imágenes procedentes del dispositivo de Bousselham y que Pablo Iglesias había visto en la tarjeta de memoria. El juez subraya que Iglesias en ese momento tenía acceso a la tarjeta que guardaba en su poder por los que sabía que se estaban publicando imágenes enviadas a terceros mandadas por la asesora. En este sentido, afirma que con la única finalidad de desprestigiar a ese medio de comunicación, y a sabiendas del origen de las imágenes publicadas, instó a "los servicios jurídicos del partido a ampliar la denuncia inicial formulada por Bousselham, tratando de simular falsariamente, una conexión entre las imágenes publicadas en el digital y la desaparición del teléfono el 1 de noviembre de 2015". De este modo, el magistrado relata que, bajo las instrucciones dadas por Iglesias, y con el beneplácito de la dirección de la asesoría jurídica del partido, presentaron la desaparición del teléfono "como un encargo realizado por el Gobierno del PP al excomisario Villarejo, para publicar en el digital, en el contexto de una campaña para perjudicar a Iglesias, y por ende a Podemos" y así usar de forma fraudulenta este proceso para intentar lograr algún tipo de ventaja electoral.

Por ello, califica de "consciente y planificada actuación falsaria desplegada por el señor Iglesias con su personación, fingiendo ante la opinión pública y ante su electorado, haber sido víctima de un hecho que sabía inexistente, pocas semanas antes de unas elecciones generales".

Loading

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€