Adelante Melilla pide al Gobierno que “deje de criminalizar a la hostelería” y que abran los bares y restaurantes en horario limitado y con estrictas medidas de seguridad acompañadas de inspecciones para garantizar su cumplimento. Pero, al mismo tiempo piden que imponga un "toque de queda" en toda la Ciudad desde las 23 hasta las 7 de lunes a viernes y hasta las 9 los fines de semana. Carmen Molina, miembro de la Dirección de Adelante Melilla, ha afirmado que “no sirve absolutamente de nada cerrar toda la hostelería mientras se sigan permitiendo botellones, quedadas, reuniones, etc, en espacios públicos y mientras ya se organizan eventos privados en domicilios, locales o garajes”, recoge una nota de prensa.
Apostilla que “se ha señalado injustamente a la hostelería como si fueran el principal foco de contagio cuando no hay ningún dato que lo sostenga o confirme”. Por ello, piden al consejero de Políticas Sociales que “rectifique y permita en esta misma semana que los hosteleros melillenses vuelvan a abrir con limitación de horario y aforo según tipo de Licencia”.
El consejero “está a tiempo de evitar despidos masivos y cierres indefinidos que ya se empiezan a tramitar” manifiesta Adelante Melilla que también pide que “con urgencia se limiten el tráfico aéreo y portuario de pasajeros permitiendo sólo traslados por motivos profesionales, de salud, formación, etc, y se realicen pruebas PCR a dichos pasajeros que desembarquen en Melilla”. “El confinamiento parcial junto con aislamiento parcial ayudará a descender las altas cifras”, añaden. Molina afirma que el “descontrol del Covid19 en Melilla se debe a la relajación por parte de las autoridades durante todo el verano”. “Cuando estuvimos en cero contagios, Adelante Melilla pedimos controles en puerto y aeropuerto y prácticamente el Gobierno se rio de la propuesta, pero lamentablemente de aquellos polvos, estos lodos".
