El C.V. Melilla se enfrenta este domingo (16’00 horas/ Pabellón Javier Imbroda) al CDV Río Duero Soria, en partido correspondiente a la cuarta jornada de la Superliga Masculina de Voleibol. El choque se celebrará sin público y a puerta cerrada, en cumplimiento del protocolo COVID-19, exigido por las autoridades sanitarias. El equipo melillense llega al choque en buena forma, con Mariano Giustiniano en la fase final de su recuperación y Javier Monfort totalmente adaptado a la dinámica del equipo. La derrota frente a Almería no ha pasado factura a los jugadores, que están muy motivados y deseosos de volver a la senda del triunfo, a lo que se une el rival, el Río Duero Soria es un equipo fuerte, muy sólido y con mucha calidad construido alrededor de un gran armador y de un destacado opuesto, Gerard Osorio, que es uno de los mejores atacantes de la liga.
Ambos conjuntos están llamados esta temporada a luchar por clasificarse tanto para la Copa del Rey como para los Play-Offs. Son dos equipos fuertes, sólidos en defensa y potentes en ataque que llegan deseosos de medir sus fuerzas para ver quién queda más arriba en la tabla y, de alguna manera, se convierte en el equipo revelación que logre meterse en la pelea con los grandes conjuntos históricos.
Ambos conjuntos llegan con el mismo bagaje, ya que los de Salim Abdelkader ganaron con facilidad las dos primeras jornadas y, a pesar del buen juego, cayeron en Almería ante el Unicaja, uno de los clubes más potentes de la competición. Por su parte, los sorianos vencieron con mucha superioridad a la Textil Santanderina y al Arenal Emevé en sus dos primeros encuentros y cayeron la pasada semana en casa ante el CV Guaguas que este año ha construido un conjunto llamado a llevarse todos los títulos en juego.
“Creo que este partido es un examen para ambos equipos para ver realmente qué opciones tenemos unos y otros. Creo que estamos llamados a estar en la parte cómoda de la tabla y ahora es cuando debemos demostrarlo”, señaló el técnico melillense.
La lesión de Mariano
Si bien Mariano Giustiniano está entrenando con el resto del equipo y se encuentra bien físicamente, la cicatriz de la rotura muscular abdominal no ha sellado del todo y desde el conjunto azulino no quieren arriesgar. Es posible que tenga minutos durante el encuentro, sobre todo para ver sensaciones, pero es probable que no le veamos entrar con normalidad en las rotaciones hasta el partido contra el Ibiza, de la sexta jornada, como se tenía previsto desde el inicio de la lesión.
“Mariano está casi recuperado por completo pero no está al cien por cien. Está entrenando con el grupo pero con restricciones. La lesión no ha cicatrizado del todo y no queremos arriesgar. Para nosotros es un jugador importante y preferimos perderlo por varios partidos y luego tenerlo a tope el resto de la liga que ir probándolo poco a poco y arriesgar. Con Mariano está claro que somos mejores, pero sin él estamos jugando muy bien y el resto de compañeros están dando la cara, así que no tenemos prisa”, concluyó el míster melillense.
Tres partidos en siete días
El partido del domingo frente al Río Duero Soria será el primero de tres encuentros clave para las aspiraciones del equipo de nuestra ciudad. Tras el partido ante los sorianos, los de Salim Abdelkader se enfrentarán, el miércoles, al Conectabalear CV Manacor, sin apenas tiempo para recuperar ni entrenar.
Tras el partido en tierras baleares, los azulinos vuelven a casa para enfrentarse el siguiente domingo, 1 de noviembre, a otro equipo insular, el Ibiza Vóley.
Los melillenses necesitan sumar en al menos dos de estos tres enfrentamientos para que sus aspiraciones de clasificarse para jugar la Copa del Rey sigan intactas.
