El diputado local del PP de Melilla, Manuel Ángel Quevedo, dejó de manifiesto ayer que la “preocupante situación sanitaria” que vive Melilla con contagios y que la sitúan entre las primeras a nivel europeo, es consecuencia de “la descoordinación, inacción y cobardía” del Gobierno de la Ciudad que encabeza Eduardo de Castro, más centrado en “poner sus desavenencias por encima de la salud de los melillenses”. Asegura que desde el fin del estado de alarma el Gobierno local “no ha hecho nada para parar la segunda ola” de la pandemia. Quevedo manifestó que Melilla se encuentra en una “situación sanitaria prácticamente al límite” con contagios que nos sitúan al nivel de territorios de mayor volumen de residentes y extensión geográfica como Navarra. El hecho de que Melilla acumule más de mil positivos mientras en Ceuta apenas si llegan a los 200, un 76% menos, demuestra que “algo no está bien”. Las cifras nos sitúan “entre las peores regiones de Europa en número de contagios”.
La situación hospitalaria no es mejor, con cifras ”muy por encima de los límites que se piden para los confinamientos”, con las UCI casi al completo, que obligan a derivar pacientes a otras instalaciones. “Los datos de Melilla son especialmente negativos y evidencian que no se han hecho bien las cosas, porque Melilla, por su dimensión es fácil de controlar, por eso es raro que con la frontera cerrada, con puerto y aeropuerto activo, se haya llegado a estar en los peores números de España”, indico.
Descoordinación
Quevedo considera que una de las causas es la “descoordinación y falta de rumbo del Gobierno de la Ciudad y la falta de liderazgo del presidente Eduardo de Castro, algo que nadie niega”. Critica además que el Gobierno de la Ciudad impida a la oposición participar en la adopción de medidas para combatir la crisis, y afirma que llevan meses solicitando comisiones e incluso un pleno extraordinario para abordar el asunto y hasta ahora no han sido atendidas.
Tiene claro que desde el fin del estado de alarma el 21 de junio, “no se ha hecho prácticamente nada, sino que se han ido de vacaciones”. No entiende Quevedo que Eduardo de Castro apueste por la coordinación como uno de los elementos principales de acción cuando tiene “rotas desde hace meses las relaciones con el consejero de Salud Pública, al que se boicotea y paraliza sus órdenes, y además tiene prácticamente rotas las relaciones con la delegada del Gobierno a la que llama mentirosa públicamente”.
Tilda de “patética la situación” del Gobierno local que “pone sus desavenencias por encima de la salud de los melillenses, y les interesa más pelearse entre ellos que llegar a un acuerdo”.
Inacción
A la descoordinación sumó la inacción, porque señala que desde junio no se han adoptado medidas para preparar la segunda ola, lo que ha conducido a que con urgencia se haya decretado el cierre de la hostelería, “algo que se podría haber evitado con medidas quirúrgicas como el cierre de los que no cumplen las normas, pero ahora se mantan moscas a cañonazos”.
Se lamenta de que no se hayan tenido en cuenta todas las propuestas que ha traslado el PP en estos meses y se preguntan cómo se van a gastar los 25 millones del fondo no reembolsable que va a recibir Melilla del Estado para combatir la crisis del coronavirus, y señala que lo adecuado hubiese sido firmar convenios en junio con INGESA, Educación e IMSERSO que permitiese aumentar el número de personal sanitario y administrativo, el de docentes y los recursos.
Cobardía
A la descoordinación y la inacción sumó la “cobardía” de un Gobierno local que “aplica la estrategia de echar la culpa al Gobierno central”. Señala, en este sentido, que Eduardo de Castro, tanto en Twitter como en la rueda de prensa de ayer, responsabiliza al Ministerio de Sanidad y al Gobierno central de la situación de la ciudad, “diciendo que se ha hecho lo que se le dijo, y resulta vergonzoso que no asuma sus responsabilidades y debería dimitir”.
Quevedo manifiesta que el Ejecutivo de la Ciudad podía haber elevado propuestas e iniciativas al Gobierno de España pero sus miembros se han dedicado a “boicotearse entre sí, como el presidente con el consejero de Salud Pública, mientras otros han estado desparecidos en la pandemia más grande del siglo y CPM ha aprovechado el tiempo para concretar actuaciones de clientelismo político”.
Lo que resulta “incomprensible” para el popular, es que Gloria Rojas, secretaria general del PSOE y vicepresidenta de la Ciudad, “admita” esta situación, y mantenga a De Castro como presidente “pese a que ataque al consejero del PSOE, a la delegada del Gobierno socialista, al ministro de Sanidad y al propio presidente del Gobierno del PSOE”. Se pregunta qué persigue Rojas al asumir todo esto, si es con “alguna finalidad personal, política o de otro tipo, pero esta barbaridad no es normal”, sentencia.
Irresponsabilidad
En opinión del popular, la rueda de prensa de ayer de De Castro junto a las vicepresidentas Dunia Almansouri y Gloria Rojas fue para “intentar hacer ver que hace algo, pero comparece para no decir nada, ni presentar ninguna medida”, salvo decir que Rojas va a coordinar las acciones del covid en el Gobierno de la Ciudad y se pregunta qué ha venido haciendo hasta ahora la vicepresidenta en esta crisis. Este anuncio no deja de ser “fuegos artificiales porque esto no cambia nada” y considera que tendrá la misma relevancia que la comisión especial del covid que “no se ha reunido porque a Jesús Delgado no lo pueden poner de presidente”.
De la comparecencia de Eduardo de Castro criticó que no tuviera una respuesta concreta a las cuestiones que se le formularan y calificó de “patético y grosero” que no se hagan test de antígenos a la Policía Local bajo su mando y que sin embargo el consejero de Deportes realice test a todos los deportistas y el de Distritos hable de hacer un cribado general entre la población.
Por todo ello entiende que es “una irresponsabilidad no dar un cambio de rumbo al gobierno local con la participación activa de la oposición y unirlo a necesarios ceses y dimisiones”. Afirma que la historia “va a ser implacable con este gobierno, y les pasará factura, si no es la justifica la que puede pedirles responsabilidades porque esto está llegando a unos límites que rallan la imprudencia temeraria”, aseguró.
Toque de queda
A preguntas de los periodistas, Quevedo manifestó que el PP estaría a favor de un toque de queda o confinamiento nocturno, pero no entiende la indefinición de Eduardo de Castro al respecto. “Si usted hace el daño de cerrar la hostelería mañana y tarde, no parece razonable que por la noche la gente se pueda mover por la ciudad en otro tipo de ocio que es inadecuado y el que más contagios puede producir”, señala.
Quevedo no comprende que De Castro no concrete si se aplicará esta medida, sobre qué horario y que deje la decisión en manos del Ministerio. “De Castro es el presidente de Melilla, es el que nos representa y no el ministro Illa”, apostilló.
Las peleas internas, causa del retraso en las ayudas a empresarios
Por otra parte, Manuel Ángel Quevedo criticó la tardanza que viene experimentando la concesión de las ayudas a los empresarios y autónomos, porque, aunque la consejera de Hacienda, Dunia Almansouri anunció que en junio comenzarían a abonarse, no ha sido hasta mediados de octubre cuando se han pagado las primeras, tal como afirma ya vaticinó el PP. Recuerda que el programa de ayudas se aprobó en pleno en mayo. Las bases se publicaron el 17 de julio en el boletín de la Ciudad y de las 710 solicitudes recibidas, se han aprobado 78 definitivamente y 56 más de forma provisional, lo que suman 134, un 18% del total. De las aprobadas se han abonado 38.
El motivo de todo ello es que “se ha empezado muy tarde”, y entiende que ya que se preveía que habría un número importante de solicitudes, lo acertado hubiese sido destinar al personal necesario para iniciar el estudio de los expedientes a medida que se recibían, “pero estaban en el Gobierno entretenidos con la sustitución de Julio Liarte en Promesa, a CPM queriendo quedarse con la sociedad y al PSOE evitándolo, es decir, que se han dedicado a retrasar comisiones con sus peleas” y no se han resuelto los expedientes.
Asegura que el PP “siempre votará a favor de estas ayudas” e insiste en remarcar la diferencia de actuación del Gobierno de la Ciudad hermandad y el de Melilla. El motivo es que mientras en nuestra ciudad se han aprobado 134 expedientes con un coste de 680.000 euros, en Ceuta son 2.079 por un montante los concedidos con un coste de 8,7 millones de euros en ayudas a empresarios y autónomos.
Indica además que “con las condiciones leoninas” que se han puesto a los solicitantes de ayuda en Melilla, apenas si se destinarán a estas ayudas unos 5 millones de los 12 previstos, por lo que habrá que sacar nuevas líneas de subvenciones, como la que se anuncia para la hostelería. Manifiesta Quevedo que de seguir el ritmo actual de resolución de expedientes, teme que el pago a todos los solicitantes se alargue hasta mediados del próximo 2021.
