El secretario general del Sindicato Unificado de Policía (SUP) en Melilla, Jesús Ruiz Barranco, explicó a este Diario que aún no ha salido el BOME sobre cómo va a afectar el confinamiento nocturno, pero van a seguir los protocolos de este nuevo estado de alarma “con rodaje” debido al confinamiento general que ya pasó la población melillense. Sobre la situación del brote en la Jefatura, aseguró que está “bastante mejor” con respecto a los meses anterior y actualmente hay solo 9 policías nacional que han dado positivo en COVID y unos 29 en confinamiento preventivo a la espera de que les hagan las PCR en estos días. El secretario general del SUP, Jesús Ruiz Barranco, señaló que no ha salido el BOME sobre cómo va a afectar el confinamiento nocturno y que van a conocer ahora de qué forma van a tener que actuar, pero el trabajo ya “es rodado y el estado de alarma hizo que los policías nacionales hicieran un trabajo exquisito de mucha profesionalidad haciendo que la gente se quedara en casa y que llevaran puesta la mascarilla”.
Resaltó que el confinamiento va a ser nocturno, se va a aplicar igual, siguiendo las medidas desde Delegación y las propuestas de sanción pertinentes cuando se lo comuniquen los responsables de Unidad y la Jefatura Superior de Policía.
Respecto al brote en la Jefatura, remarcó que “bastante mejor” porque desde finales de agosto a principios de septiembre llegó a dos plantas de la Jefatura y al personal que trabaja en ella, y hubo problemas en cuanto a las bajas, confinamientos y podía haber afectado a los servicios, pero no afectó al turno de 24 horas porque fue más de gestión y de unidades policiales. Añadió que la situación puede ser cambiante, aunque hasta el viernes pasado había solo 9 policías nacionales positivos en COVID y unos 29 en confinamiento preventivo a la espera de hacerles las PCR.
Dejó claro que la situación es “muy variable”, aunque los policías nacionales llevan puestas sus mascarillas, guardan las distancias y se le pidió al Jefe Superior y al jefe de las Unidades que haya grupos estancos de trabajo, incluso los turnos de 24 horas. Barranco hizo hincapié en la recepción y movilidad porque desde la Jefatura se mandan instrucciones para que los compañeros no se trasladen desde puestos de trabajo diferentes y que no haya entrada de “gente extraña” a la Jefatura con medidas de precaución con respecto a las identificaciones.
El secretario general aseguró que, si los compañeros se tienen que llevar equipos EPIS “más fuertes” contra la pandemia por si tienen que hacer un trabajo por una entrada de inmigrantes o algo relativo a los contagios, hay medios para poder solventarlo, “cosa que no pasaba cuando se produjo el estado de alarma”.
En cuanto a si hay un refuerzo de limpieza y desinfección, respondió que sí, se está limpiando con “más asiduidad” las dependencias donde hay personal, aunque “la Jefatura Superior es antigua, del año 1984, se hizo para una situación diferente con menos personal, más para temas de gestión y se ha tenido que hacerse más dependencias que no tienen salida al exterior, con ventanas internas y hace que la situación sea problemática porque el virus se mueve por los aerosoles y hay compañeros que trabajan en verdaderas cuevas dentro de la Jefatura”.
Desde el SUP llevan reclamado desde hace mucho tiempo cambios en la Jefatura con un memorándum que se entregó a Abdelmalik El Barkani, y a la actual delegada del Gobierno.
Expuso que ahora la situación está más controlada y hay limpieza, geles en la entrada, en las Unidades y también una “mayor conciencia” del problema porque hay compañeros que se han contagiado, han estado enfermos e incluso algunos tuvieron que ser hospitalizados. “Esta concienciación de que el virus es problemático y de momento no hay ninguna vacuna que lo pueda parar, hace que la gente se preocupe más”, sostuvo.
Toque de queda en Melilla
Sobre qué le parece el toque de queda, Ruiz Barranco, de forma personal, cree que las medidas se tenían que haber aplicado antes porque Melilla está “en una situación bastante problemática y de saturación de enfermos en el Hospital que afecta a la situación sanitaria de toda la ciudad”. “Cumplimos un confinamiento de casi tres meses y la gente se aplicó el cuento, no salieron a la calle, solo para comprar, trabajar, hubo mucho teletrabajo e incluso en la Jefatura se implantaron unas jornadas de trabajo para que no hubiese tanto personal trabajando”, concluyó.
