Este domingo 1 de noviembre debían abrir cafeterías, bares, restaurantes y locales de ocio de Melilla, día en el que acaba el cierre total de la hostelería decretado por el Gobierno de la Ciudad por 15 días, pero no será así finalmente. La Asociación de Empresarios de Hostelería de Melilla informaron anoche que ha sido “prorrogado el Decreto que nos obliga a seguir cerrados hasta el 9 de noviembre”.
La entidad que aglutina a los hosteleros melillenses se pregunta “¿Y ahora? Ahora exigimos una compensación económica. No queremos limosna. Esta situación no es culpa de los hosteleros, nosotros somos las víctimas del Gobierno de Melilla”. La entidad que preside Chakib Mohamed ha denunciado públicamente que “nos sentimos despreciados y engañados”.
La reacción de los hosteleros no se ha hecho esperar y, tras parar sus protestas a inicios de semana como gesto de buena voluntad tras ser recibidos por el presidente Eduardo de Castro, anoche mismo convocaban movilizaciones para este sábado en forma de caravana-protesta a partir de las 19.30 horas.
