Tengo la sensación, que cada día que pasa se va convirtiendo en seguridad absoluta, de que nuestros gobernantes (como bien explicó Francisco Bohórquez en su artículo del sábado 7) locales y nacionales (es difícil saber, dado el alto grado de ineptitud de ambos, cual es peor) sólo quieren hacer cosas que consigan tenernos controlados en todo momento y que no dejen que los ciudadanos se puedan realizar o puedan desarrollar proyectos propios. Ellos quieren mantener el control de todo, que todos dependamos de sus decisiones para sobrevivir, que cualquier iniciativa privada sea casi imposible por los largos y costosos trámites burrocráticos (no es un error; burro…). Si todo el mundo es funcionario, trabaja para el Estado, está subvencionado, está cobrando el paro, cobra el ingreso mínimo vital, cobra el subsidio agrario, es pensionista, etc…; entonces muchos de esos estómagos agradecidos les votarán siempre y conseguirán su verdadero objetivo, que es seguir en el poder y poder seguir viviendo como viven ahora, que en la mayoría de los casos es infinitamente mejor de cómo vivían antes. Para mantener esta situación tan favorable para sus intereses (no para los de la mayoría de los españoles y melillenses), podrían aplicar lo que dijo el filósofo chino Lao-Tse (570 AC-490 AC): “Si das pescado a un hombre hambriento, le nutres una jornada. Si le enseñas a pescar, le nutrirás toda la vida”; pero no, éstos prefieren darnos migajas (que antes nos quitaron a mansalva, vía impuestos), fomentar todo lo público y que las pocas empresas que vayan quedando paguen todo.
Dice un proverbio turco: “El que no da un oficio a su hijo, le enseña a ser ladrón”. En este caso el “padre Administración” no nos quiere enseñar un “oficio” (no quiere que, con su ayuda o sin ella, seamos independientes de sus decisiones) nos quiere subsidiar y eso nos convertirá en vagos o ladrones.
Martes::
La Autoridad Portuaria pidió a De Castro su “apoyo expreso” para impulsar la línea marítima entre Melilla y Argelia. Es una petición trampa, porque saben que De Castro, además de ser incapaz de impulsar algo, no tiene capacidad alguna de influencia en un gobierno como el español, que no toma nunca decisiones que puedan molestar a Marruecos, declarado enemigo de Argelia.
Viernes:
Josefina Visiedo, una melillense de 101 años que se encuentra en una Residencia de Mayores del Rincón de la Victoria (Málaga), es un ejemplo de superación tras vencer al coronavirus. Josefina ha pasado casi toda su vida en nuestra ciudad, tiene muchos amigos que la conocen y nos hizo llegar su deseo de que supieran que se encuentra “estupendamente”. Su hijo Francisco se desplaza desde Melilla todos los meses para verla y también sus seis nietos y trece biznietos acuden a verla siempre que pueden. Ella dice sentirse, a sus 101 años, “con fuerzas y con ganas de vivir”.
Este ejemplo de superación y de lucha nos da alguna esperanza de que, aplicando el refrán de Buda: “Para enseñar a los demás, primero has de hacer tú algo muy duro: has de enderezarte a ti mismo”, si luchamos y no nos rendimos, podremos enseñar el camino a otros.
Sábado:
La Audiencia Nacional archivó la causa contra tres militares marroquíes por la muerte de los melillenses Emin y Pisly. La Sala estimó el recurso de apelación interpuesto por la fiscalía contra el auto dictado por el titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 por el que se envió a prisión al comandante Munir Tisman y a los sargentos Aziz El Mals y Muhein Briul, como presuntos autores del suceso que tuvo lugar hace siete años en Punta Negri. La causa principal del recurso de la Fiscalía (¡vaya papelón el de ésta!) fue la falta de auxilio judicial por parte de Marruecos, al desconocerse dato alguno de un supuesto procedimiento penal en Marruecos por los hechos. El Ministerio Público explico que: “se desconoce dato alguno al no haber sido facilitada información por las autoridades marroquíes”.
Una vergüenza más que nos hace pasar nuestro incompetente gobierno. Marruecos nos chulea cómo y cuándo quiere y nos toma como lo que estamos empezando a ser: un país intrascendente y sin ninguna influencia.
Frases:
“El “padre Administración” nos quiere subsidiar y eso nos convertirá en vagos o ladrones”.
“Si luchamos y no nos rendimos, podremos enseñarle el camino a otros”.
J.B.
