El secretario general del PP de Melilla, Miguel Marín, instó ayer al Gobierno de Melilla a que indemnice a los hosteleros de la ciudad con el pago de todos los gastos que han tenido durante las cinco semanas de cierre ordenado por la Consejería de Salud Pública para frenar la expansión del coronavirus. En declaraciones a los periodistas, Marín justificó esta petición al asegurar que la pandemia “ha atizado con mayor virulencia” al sector de la hostelería “por la incompetencia de quienes administran y gestionan la Ciudad Autónoma”.
Así, afirmó que los establecimientos hosteleros recibieron la orden de cierre sin ningún informe técnico que avalara esa decisión del área de Salud Pública que, a juicio de Marín, fue “una decisión totalmente apresurada, atropellada” y, además, “errónea”, dado que se adoptó con unos datos “que no se correspondían con la realidad y que fueron rectificados el pasado sábado.
Según Marín, si el Gobierno de Melilla hubiera adoptado medidas preventivas tras la finalización del primer estado de alarma, el 21 de junio, cuando Melilla no contaba con casos activos de coronavirus, la situación habría sido distinta a la que ha sufrido en esta segunda ola, por lo que volvió a lamentar que no hicieran caso a la propuesta del PP en aquel momento.
Marín volvió a expresar el rechazo del PP a que se cerrara “a cal y canto” el sector de la hostelería en lugar de mantener su actividad, como han hecho en otras regiones, como la Comunidad de Madrid, de ahí que instara al pago de una indemnización a todos los hosteleros para cubrir todos los gastos que han tenido mientras han estado cerrados y sin ingresos por “la irresponsabilidad” del Gobierno regional.
Asimismo, instó al pago cuanto antes de las ayudas y que “se tomen medidas importantes” de cara a los establecimientos hosteleros que no podrán abrir a partir de este lunes por carecer de terrazas, y también a aquellos que, pese a disponer de ella, tendrán “una mínima actividad”.
De este modo, en palabras de Marín, se podrá compensar “la situación crítica que viven” algunos empresarios del gremio, del que recordó que dependen “cientos de familias”.
