Vox Melilla ha reclamado que el nuevo hospital de nuestra ciudad esté acabado en el año 2022 y no sufra más retrasos, desde que la construcción del edificio situado en el antiguo hospital militar se iniciara en el año 2009, hace ya once años.
Vox Melilla ha advertido que hablar del Hospital Universitario de Melilla “es hablar de ineptitud e ineficacia; de derroche y malgasto de dinero; de mala gestión y de inoperancia política”.
La vocal de la gestora de Vox Melilla, Magdalena Muñoz, ha lamentado que la empresa TRAGSA haya comentado la necesidad de acometer obras en el hospital “como reforzar la estructura de la cimentación, impermeabilización de la cubierta de hormigón, demolición de los paneles de la fachada, demolición de la solería, con unos sobrecostes de 3 millones de euros”.
Muñoz ha manifestado que este edificio se inició en 2009 con una inversión prevista inicial de 70 millones de euros, y un plazo de finalización de 39 meses. En 2012 las obras fueron paralizadas durante seis años por impago de certificaciones, “donde se retoma con un plazo de finalización en 2021”, ha rememorado. “El hospital ha envejecido de pura dejadez, y se ha deteriorado. Nos ha cogido la pandemia de esta guisa”, ha asegurado Muñoz.
VOX Melilla ha denunciado que “en plena pandemia cobra vigencia la dejadez sistémica del Gobierno Central para la Ciudad de Melilla, el sobrecoste económico, pero sobre todo en vidas humanas, la miseria espiritual de los gobernantes que sólo están para cobrar, salir en la foto y mentir”. Muñoz ha dicho que esa es la realidad actual de Melilla, “equivalente a la realidad de la España actual. No podemos esperar al 2022 para que nos lo alarguen otros tres años con otros nuevos sobrecostes. Queremos el hospital para el 2022, y como tal lo reivindicamos”.
