Melilla cerró la semana pasada sin ninguna víctima mortal de la pandemia. Hacía casi dos meses y medio que no lo conseguía, según los datos oficiales facilitados por la Consejería de Economía y Políticas Sociales. Para encontrar la última hay que remontarse al domingo 4 de octubre. A partir de entonces, han transcurrido 10 semanas que acumulan un total de 36 fallecidos con coronavirus diagnosticado, el 86 % de los 42 contabilizados en nuestra ciudad de manera oficial desde el inicio de esta crisis sanitaria. Todas las semanas que han transcurrido desde aquel lejano 4 de octubre habían registrado, al menos, una muerte relacionada con la COVID-19. La que más, la comprendida entre el 2 y el 8 de noviembre, que ha sido, hasta ahora, la más dura de todas desde el inicio de la pandemia, con nueve víctimas mortales.
La anterior, del 26 de octubre al 1 de noviembre, también lo fue, con siete fallecidos. Solo en esas dos semanas fueron contabilizados 16 fallecidos, cerca de un 40 % del total.
También destacan las semanas del 9 al 15 y del 16 al 22 de noviembre, con cuatro muertes de personas con coronavirus diagnosticado cada una, lo que supuso un total de ocho en esos 14 días.
Menos curados y menos contagios
Además del cierre sin víctimas mortales, la semana pasada también tuvo otros signos que evidencian una mejora o estabilización de la situación al registrar menos contagios que la anterior, aunque también un número inferior de personas dadas por recuperadas.
Así, entre el 7 y el 13 de diciembre hubo 91 nuevos casos de coronavirus y 273 pacientes dados de alta por considerar que ya están curados. En la semana inmediatamente anterior, la que fue desde el 30 de noviembre hasta el 6 de diciembre, fueron 109 contagios, es decir, 18 menos que la siguiente; y 284 curados, esto es, 11 menos.
