El presidente de Melilla, Eduardo de Castro, negó este miércoles que las nuevas medidas restrictivas para esta Nochebuena, que adelantan el toque de queda a las 00.30 horas y limita a seis las reuniones familiares, sean “un capricho” y, de hecho, no descarta que pueda haber cambios también para Nochevieja.
En rueda de prensa, De Castro salió al paso de las críticas que ha generado el decreto publicado solo 48 horas antes de Nochebuena, que limita las directrices que ya se habían establecido una semana antes, y negó que esto suponga que su Gobierno se apresurara a la hora de elaborar el Plan de Navidad.
De Castro argumentó que el caso de Melilla no es aislado y prácticamente todas las regiones españolas han tenido que endurecer las restricciones que ya habían adoptado, por lo que calificó como “irresponsables” algunas de las críticas que ha recibido por el nuevo decreto, entre ellas, las del líder del PP y su antecesor como presidente melillense, Juan José Imbroda.
“Hay que tomar estas medidas porque los contagios siguen, la tercera ola se acerca y, aunque está contenida, no deja de avanzar”, explicó De Castro para motivar este endurecimiento de las medidas para Nochebuena cuando, desde que se publicó el primer Plan de Navidad hasta que se han introducido cambios, la cifra de casos activos ha bajado en casi un centenar en Melilla.
Según el presidente de la Ciudad Autónoma, “los datos son cambiantes” y, de hecho, así ha sucedido en algunas regiones que presentaban una buena situación epidemiológica y, en pocos días, su situación ha dado un giro de 180 grados, habida cuenta que “el virus aprovecha la más mínima relajación para golpearnos mucho y fuerte”.
“Lo prioritario es salvar vidas, reducir lo enfermos y, si para el día 31 hay que hacer alguna restricción más, se hará”, agregó De Castro, que justificó este decreto para evitar que nadie pueda decir, en caso de que más adelante haya un repunte, que el Gobierno no adoptó en su momento más restricciones dentro de sus posibilidades.
Se hace responsable
De Castro se mostró convencido de que la adopción de medidas “duras e impopulares” supone “la única barrera que se puede poner a esa ola que, aparentemente, está parada”, pero que “va llegando por otra parte desde Europa a España”, lo que obliga a adoptar más restricciones.
El presidente se hizo responsable de haber firmado este decreto con unas medidas que “no son un capricho ni se negocian”, aunque aseguró que “están habladas con los técnicos” y también con sus socios de Gobierno, ante los rumores que apuntan a un posible descontento por la adopción de estos cambios.
Respecto a si podría haber malestar entre los miembros socialistas del Ejecutivo de Melilla, De Castro dijo que no le han manifestado nada, aunque admitió que “haya gente que no comparta el decreto”.
“No podemos estar todos de acuerdo con todo lo que hacen los demás, aunque no por ello monto un espectáculo”, dijo De Castro, que también negó que los cambios introducidos vayan a impedir la celebración navideña a las familias que se han reagrupado después de que varios de sus miembros hayan regresado a Melilla, como es el caso de los hijos universitarios, por ejemplo.
En estos casos, el presidente dejó claro que la limitación de seis personas no afecta a convivientes, que es como se considera a los hijos que regresan a casa por Navidad aunque ahora vivan fuera de Melilla.
En cuanto a los casos de familias que tenían previsto juntarse hasta 10 personas y ya habían comprado comida para la celebración, De Castro fue tajante instando a guardarla para el día siguiente, y apuntó que él preferiría donarla antes de correr el riesgo de que alguno de sus familiares enferme o muera.
“El virus se va a sentar en nuestra mesa y hay que evitar en lo posible los riesgos que ello conlleva. Si eso no lo entiende alguien, tiene un problema”, indicó De Castro, que también justificó que se haya eliminado el concepto de allegados en el Plan de Navidad porque “se nos pueden colar muchas personas o más de lo debido y es difícil de controlar”.
Confinamiento nocturno
Asimismo, aclaró que el hecho de que se retrase el inicio del confinamiento nocturno los días 24 y 31 respecto al horario habitual, que es las 23.00 horas, es estrictamente para posibilitar el regreso al domicilio, no para deambular o permanecer en la calle festejando.
El adelanto del confinamiento en media hora en Nochebuena respecto a lo que estaba previsto tampoco afecta a la Misa del Gallo, ya que en Melilla se ha adelantado respecto al horario tradicional.
Nuevo formulario para viajar por reagrupación familiar
De Castro anunció que se ha elaborado un nuevo formulario para que, aquellos que tengan que viajar para la reagrupación familiar hasta el 6 de enero, puedan presentarlo en el puerto o en el aeropuerto pese a mantenerse el confinamiento perimetral. Está disponible en la web de la Ciudad Autónoma, y también en puerto, aeropuerto y oficinas de la Administración local.
