En estos días de fin de año y entrada del nuevo, en estos tiempos de balance y reflexión, fijación de buenos propósitos, enmiendas y deseos, cabe, se impone fijar prioridades y sin ninguna duda el primero es LA VIDA.
Desde mi atalaya de ciudadano jubilado, desde mi calma que dan los años, denosto educadamente el hacer político consistente en el torpedeo y ninguneo de las acciones de gobierno que protagonizan la desleal oposición en sus diferentes niveles y colores y siglas. Llevamos demasiado tiempo asistiendo a la locura, al improperio, al y tú más y al insulto, olvidando tantos necesitados de confianza y seguridad ante la PANDEMIA y sus horrorosos efectos sobre todo en las personas, en las familias más desfavorecidas, asegurándoles el pan, techo y dignidad.
Ahora nuestro objetivo es protegernos ante el virus, el plan de vacunaciones y cumplir sus plazos siguiendo con las medidas de protección. Ahora la tarea ineludible es atender las secuelas de quienes han conseguido superarlo, los crónicos no atendidos como procedía por la presión asistencial sobrepasada. Ahora cabe aminorar los efectos de una tercera ola ineludible.
Ya vendrán tiempos de seguir apostando y reclamando: asegurar las pensiones acordes con el tiempo, dignificar las miserias de muchas, invertir en innovación e investigación subiendo la actual e insuficiente partida, apostar por la Sanidad, Enseñanza y cobertura de las dependencias bajo el prisma de lo público. Hay que volver a ilusionar a millares de pequeños autónomos y trabajadores, recuperar cerebros forzadamente fugados; seguir luchando contra la lacra de la violencia de género y contra mayores y pequeños; combatir a las mafias organizadas de la migración inhumana y esclavista.
No es tiempo de visiones cortoplacistas del binomio Monarquía o República pues ya tendrá el suyo y con esto y como tantos no desisto de mi ideal republicano. La democracia, las acciones transparentes, la igualdad ante la ley de todos y en la aplicación de penas desde un poder judicial independiente y no sumiso y encorsetado al partidismo, avanzar en la corrección de los privilegios vitalicios de tanto cargo que sirvió y no ha de servirse…
Queda tanto por hacer, ¡amigos!, demasiados bien pagaos y domésticos, instigadores de la guerra civilismo a la más mínima, evasores fiscales, pelotazos y comisiones, financiaciones irregulares, cloacas del otro Estado, inconscientes y serviles…mientras el grueso del pueblo las pasa canutas.
Seguirán, seguirán vendiéndonos la verdad que es infundada, creándonos falsas necesidades, manipulando y tergiversando según y a interés y ante ello solo cabe ponerle trabas al populismo trasnochado y añorante de tiempos dicta imperialistas, ser fiel a nuestros principios buscando a quien hace de la POLÍTICA EL ARTE DE LO POSIBLE Y ACERCA LO IMPOSIBLE, con coherencia y honradez.
Es tiempo de seguir rememorando, tantos amigos y familiares fenecidos, tantos proyectos truncados; es tiempo de agradecerles lo tanto aportado, dejarnos acariciar por lo incesante lluvia de risas y lágrimas de quienes nos siguen guiando estén donde estén. Que podamos seguir contando, soñando y ayudando a alzarse a tanto caído.
