Justo Sancho-Miñano es desde el pasado 28 de noviembre de 2020 el nuevo presidente del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Melilla, cargo al que llega con la intención de seguir mejorando la sanidad en la Ciudad Autónoma y la vida profesional de sus colegiados. El doctor melillense afirma que la Junta Directiva tiene como objetivo que Melilla sea declarada lugar de difícil desempeño en cuestiones sanitarias y luchar por el complemento específico, pues no entiende que un médico “por trabajar en la privada, deje de percibir una parte de su sueldo”. También analizó para MELILLA HOY la actual situación de la pandemia en Melilla, además de resaltar el “gran esfuerzo” que están realizando los profesionales de la sanidad local en estos difíciles momentos, aunque sobre todo lamentó “los excesos y la irresponsabilidad de mucha gente”. -¿Qué valoración hace tras su nombramiento como presidente del Colegio de Médicos?
Ahora mismo se puede hacer poca valoración. La Junta Directiva lleva poco tiempo trabajando, pero de momento vamos bien. Tenemos muchas ganas de intentar ser útiles a nuestros compañeros colegiados y a la sociedad en general. Con el paso del tiempo veremos si podemos valorar esto de forma positiva.
-¿Cómo se ha encontrado el Colegio de Médicos?
El Colegio de Médicos, a Dios gracias, nos lo hemos encontrado muy bien, después de los problemas que hubieron en el pasado. La Junta Directiva saliente ha hecho las cosas muy bien y ha dejado el Colegio de Médicos, con problemas que no eran fácilmente subsanables, bien encaminados y bien ordenados.
-¿Qué objetivos se marca?
Los objetivos que nos marcamos son muy sencillos. He dicho en otras ocasiones que este es un Colegio de Médicos pequeño y no podemos andar con proyectos grandilocuentes ni nada por el estilo. Nosotros queremos mejorar la vida de los colegiados porque así mejoraremos la sanidad y la sociedad. El objetivo que nos marcamos es que Melilla sea declarada lugar de difícil desempeño en cuestiones sanitarias y luchar por el complemento específico que es una desigualdad absolutamente aberrante que solamente existe ahora mismo en Asturias, Ceuta y Melilla. Es decir, que un médico por trabajar en la privada deja de percibir una parte de su sueldo. Sin embargo, si se dedica a otra cosa por las tardes no deja de percibirlo. Es una cosa extraña, sobre todo porque a igual trabajo, igual sueldo. Si nosotros hacemos el mismo trabajo que nuestros compañeros por las mañanas, no se entiende cómo se puede cobrar menos.
-¿Qué aspectos son los que más le preocupan como presidente del Colegio de Médicos, al margen de la pandemia?
El envejecimiento del sector sanitario y del sector médico. Cada vez somos más mayores y no parece existir recambios. Por eso, entre otras cosas, hay que seducir a la gente para que venga a trabajar y si no cambiamos algunas de las condiciones que antes hemos nombrado, cada vez va a venir menos gente y vamos a tener un déficit que ya de por si es histórico, y vamos a agravar aún más. Quizá sea eso lo que más nos preocupa y por supuesto la planificación de cómo se van a hacer las cosas a partir de ahora, teniendo la vista puesta en el nuevo hospital. Esto no va a ser algo por arte de magia, tener el nuevo hospital y de pronto cambiar las cosas. Llevamos diciendo hace mucho tiempo que hay que cambiar ya ciertas costumbres, ciertos procederes y ciertos vicios que no deben llegar nunca al nuevo hospital.
-¿Cómo valora la actual situación del coronavirus en Melilla?
La pandemia está haciendo muchísimo daño. De la primera ola, no nos enteramos apenas, la segunda ha sido tremenda y esta tercera está siendo, a fecha 20 de enero, de un ascenso realmente meteórico de casos, con la UCI con nueve personas hospitalizadas. En fin, se están viendo los excesos y la irresponsabilidad de mucha gente.
-¿Hay nueve personas en UCI, es el pico más alto o cree que va a ir a peor?
Espero equivocarme, pero me gustaría que hayan altas y que la ocupación en la UCI baje, pero lamentablemente, estamos muy expectantes y nos podemos esperar lo peor.
-¿Las medidas están siendo acertadas o se deberían adoptar más?
Las medidas son acertadas si al cumplirlas logras un beneficio que es el que persigues al poner la medida, pero si esas medidas no se cumplen, entonces hay un defecto inherente y que no deja que esa medida actúe. El otro día, sin ir más lejos, hubo un accidente enfrente de mi casa, a las once y cuarto de la noche, cuando el toque de queda es a las diez, por ejemplo. La mayoría de la gente hace las cosas bien, aunque algunas veces se despiste y puede meter la pata, pero que hay un sector de la población que le da igual. Para eso, deberían haber rastreadores suficientes, que no permitan salir a positivos de sus casas, que no permitieran que se nos escaparan gente que deberían estar confinadas por contacto estrecho y todas esas cosas. Es decir, que si las normas o las reglas que tu pones no se cumplen, ya no pueden calificarse ni buenas ni malas.
-¿Cómo está la moral del personal médico y sanitario en Melilla ante esta crisis?
La gente está muy cansada, sobre todo la de urgencia, de interna y de UCI, que son los que se están comiendo la avalancha y las olas del Covid. Es lógico, es que llevamos ya diez meses de pandemia y lo único que vemos es que la gente que tiene que tomar decisiones, sobre todo de arriba del todo, de lo que más está preocupada es de no salir dañada de la gestión de la pandemia que de tomar decisiones valientes. Los gobernantes deben gobernar acertando y equivocándose, asumiendo las consecuencias de eso, porque si yo estoy gobernando para hacer tácticas y seguir en el poder, entonces qué servicio presta a la ciudadanía. Esa es mi reflexión.
