El Melilla Sport Capital Balonmano sigue imparable y a un ritmo frenético, ya que en la tarde de ayer sábado volvió a ganar de forma contundente al BM. Pozoblanco por 32-22, en un choque que quedó prácticamente listo para sentencia en la primera mitad, con una clara ventaja al descanso de 19-11, mientras que en la reanudación pasó por encima de su oponente, principalmente al contragolpe. Los locales suman así su tercera victoria consecutiva del campeonato y siguen su progresión en la zona templada de la clasificación general. El partido fue un calco al del pasado domingo, cuando los melillenses volvieron a ganar con relativa facilidad al BM. Corazonitas, y en esta ocasión sólo lo pasaron mal en los primeros cinco minutos, ya que tuvieron que remontar un apretado 2-4, pero rápidamente el equipo que dirige Faisal Salmi ajustó su defensa y se mostró infranqueable durante todo el choque.
Así, el Melilla Balonmano comenzó a cimentar su triunfo, mientras que en ataque se mostraba mortal de necesidad ante un rival que no pudo contener el potencial ofensivo local.
El Melilla Balonmano sacaró a relucir su repertorio de grandes acciones y despegó pronto en el marcador, ya que al minuto quince ya ganaba por 13-8, ventaja que amplió hasta el 19-11 al descanso.
La segunda parte apenas tuvo historia en el guión del encuentro, excepto que la superioridad fue mucho más amplia por parte de los de Faisal Salmi, con importantes ventajas de entre nueve y diez goles, como lo refleja el marcador final de 32-22.
En el capítulo de destacados, los hermanos Yusef y Brahim fueron los grandes protagonistas, con 9 y 7 goles, respectivamente, mientras que el meta David Enríquez estuvo espectacular bajo palos, sobre todo en la primera mitad, ya que atajó numerosas acciones ofensivas de los cordobeses.
