ADÚ se estrenó en España el 31 de enero de 2020. Un año después, vuelve a la cartelera con motivo de su nominación a los Premios Goya.
Agazapados ante una pista de aterrizaje en Camerún, un niño de seis años y su hermana mayor esperan el momento oportuno para poder esconderse en la bodega de un avión, en un intento desesperado por llegar a Europa.
No muy lejos, un activista medioambiental contempla la terrible imagen de un elefante muerto y sin colmillos. Además de luchar contra la caza furtiva, también tendrá que reencontrarse con los problemas de su hija recién llegada de España.
Miles de kilómetros al norte, en Melilla, un grupo de guardias civiles se prepara para enfrentarse a la furiosa muchedumbre de subsaharianos que ha iniciado el asalto a la valla.
Tres historias, en las que ninguno de sus protagonistas sabe que su destino está condenado a cruzarse y que su vida no volverá a ser la misma.
Unos chavales africanos se ven obligados a huir de su poblado porque son testigos de un crimen. Como otros muchos, buscan desesperadamente alcanzar Europa. En su camino, caen en las redes de las mafias, los traficantes de seres humanos del siglo XXI, pero no todo es malo para ellos… En el viaje descubren la amistad, la gene¬rosidad, la lealtad, la libertad y el amor.
Esta historia se entremezcla con la de un hombre y su hija, europeos, que realizan el trayecto inverso. Viajan de España a África con el fin de reencontrarse, de conseguir una cura espiritual y alejarse del mundo de drogas y malas compañías que rodean a la joven. En paralelo, se nos presenta de modo sutil la comparación de los graves problemas de unos occidentales -falta de comunicación, desmotivación, ausencia de futuro…- con los de unos africanos -hambre, violencia, trata, abusos sexuales…- para que el espectador saque sus propias conclusiones.
Este crisol de historias entremezcladas se completa con el relato de los guardianes que velan porque esos mundos permanezcan separados, unos guardias civiles que en el desempeño de su función patrullan la frontera de Melilla.
El extenso reparto de ADÚ lo integran: Luis Tosar (Gonzalo), Álvaro Cervantes (Mateo), Anna Castillo (Sandra), Moustapha Oumarou (Adú), Miquel Fernández (Miguel), Jesús Carroza (Javi), Adam Nourou (Massar), Zayidiyya Dissou (Alika), Issaka Sawadogo (Kebila), Bella Agossou (Safí), Josean Bengoetxea (comandante Guardia Civil), Eliane Chagas (Leke), Koffi Gahou (Neko), Belén López (funcionaria de la ONU), y la colaboración especial de Ana Wagener (Paloma) y Nora Navas (Carmen).
Salvador Calvo nació en Madrid, en 1970. Para la gran pantalla ha dirigido “1898: Los últimos de Filipinas” (2016), por la que fue nominado al Goya a Mejor Director Novel, y el cortometraje “Maras” (2019), nominado al Goya en la categoría de Mejor Cortometraje de Ficción..
En 2017, Salvador Calvo fue premiado con el San Pancracio de Honor otorgado por elFestival Solidario de Cine Español de Cáceres.
En el mundo hay 258 millones de emigrantes, de los cuales 26 son exiliados. De éstos, aproximadamente cada año mueren 6.100 intentando llegar a un mundo mejor, prohibido por el simple hecho de haber nacido en una de las zonas más desfavorecidas del planeta.
Poner cara, carne y nombre a este drama, es lo que pretende Salvador Calvo con ADÚ, acercar al público a alguna de estas historias, hacernos comprender que no somos nadie para impedir que la gente pueda aspirar a una vida mejor.
La idea y los personajes de ADÚ surgieron durante el rodaje de “1898: Los últimos de Filipinas”, en Canarias. Allí, Calvo contactó con la gente de CEAR, en el municipio de Vecindario, donde conocíó a Nassis y Yean, dos niños que, pese a su corta edad, cargaban una mochila repleta de vivencias y aventuras, fascinantes y escalofriantes al mimo tiempo. Ellos fueron la inspiración de los dos protagonistas de ADÚ.
Por lo que respecta al rodaje, los cineastas querían encontrar exteriores en un país africano virgen, con la riqueza geográfica necesaria para mostrar el recorrido de Camerún a Marruecos, atravesando Senegal y Mauritania.
Tras hallar localizaciones en países tan distintos como Ghana, Nigeria, Mozambique, Costa de Marfil, Guinea, Ruanda, Camerún y Senegal, encontraron la República de Benin gracias a la actriz Bella Agossou, un país que nunca ha acogido un rodaje internacional. Los productores Javier Ugarte y Edmon Roch, junto con el jefe de producción Sergio Gil, se instalaron en Cotonou y, poco a poco, lograron formar un equipo capaz de rodar una película que contaba con elefantes, reservas naturales, una Venecia en la jungla, aeropuertos africanos y todo el peligro y belleza de un paisaje salvaje en contraposición al otro gran escenario, la valla de Melilla.
Conseguir actores nativos les llevó medio año de casting en África, pero el esfuerzo mereció la pena. Descubrieron a Moustapha Oumarou (Adú), un prodigioso niño de 6 años, la debutante Zayidiyya Dissou o el joven Adam Nourou.
ADÚ está nominada al Goya en las categorías de: Mejor Película, Mejor Director (Salvador Calvo), Mejor Actor Secundario (Alvaro Cervantes), Mejor Actor Revelación (Adam Nourou), Mejor Guion Original (Alejandro Hernández), Mejor Música Original (Roque Baños), Mejor Canción Original, Mejor Dirección de Producción, Mejor Dirección Artística (César Macarrón), Mejor Fotografía (Sergi Vilanova Claudín), Mejor Montaje (Jaime Colis), Mejor Sonido, Mejores Efectos Especiales (Raúl Romanillos) y Mejor Maquillaje y Peluquería (Elena Cuevas, Mara Collazo y Sergio López).
Este año, la gala de los Premios Goya, presentada por Antonio Banderas y María Casado Paredes, se celebrará el 6 de marzo en el Teatro del Soho Caixabank, Málaga.
Además de estas trece nominaciones, ADÚ también lo ha sido a los Premios José María Forqué, en las categorías de Mejor Película y Cine en Educación i Valores. Y Premios Feroz, categoría Mejor Música.
