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¿Están escondiéndose los responsables de gestionar la pandemia?

La última vez que vimos a Sabrina Moh respondiendo a los periodistas fue el 3 de diciembre de 2020. Han pasado más de dos meses. Le ganan Omar Haouari, responsable del INGESA, al que no vemos desde hace más de tres meses, y Juan Ángel Berbel, que no convoca a la prensa desde antes de que empezara el curso, el 30 de agosto. Han pasado casi seis meses En Melilla nos hemos acostumbrado a que la transparencia vaya perdiendo enteros día tras día, pero eso no quiere decir que sea normal lo que está sucediendo. La pandemia ha borrado de los atriles de prensa a los responsables políticos que deben dar la cara ante la opinión pública porque esa es también una de sus responsabilidades. ¿Desde cuándo no vemos a la delegada del Gobierno, Sabrina Moh, dando una rueda de prensa? ¿Y al director territorial del INGESA? ¿Cuándo fue la última vez que el presidente de la Ciudad Autónoma se puso delante de todos los periodistas para responder sus preguntas? ¿Y el director provincial del Ministerio de Educación, que también tiene mucho que decir sobre cómo se está gestionando la pandemia en las aulas?
Hay que hacer, verdaderamente, un esfuerzo de memoria o hemeroteca para encontrar las últimas comparecencias de estos tres cargos públicos, que son, no lo olvidemos, tres grandes responsables en la gestión de la pandemia. La última vez que vimos a Sabrina Moh respondiendo a los periodistas fue el 3 de diciembre de 2020. Han pasado más de dos meses. Le gana Omar Haouari, responsable del INGESA, al que no vemos desde el 10 de noviembre, hace más de tres meses. Juan Ángel Berbel, director provincial de Educación, no convoca a los periodistas desde antes de que empezara el curso, el 30 de agosto. Han pasado casi seis meses.
El presidente, que ahora tiene por Real Decreto la máxima responsabilidad en la gestión de la pandemia, está más cómodo dando declaraciones grabadas por Tele Melilla, simulando que cumple con su deber de informar, algo que solo hace a medias, pues no son ruedas de prensa ni se expone a las preguntas de los medios de comunicación. Los canutazos a la televisión pública cuando acude a inaugurar algo son solo eso, apariciones de cara a la galería para decir lo que él quiera, sin que nadie le pueda salir con preguntas incómodas. Su última comparecencia fue el 26 de enero, hace algo más de dos semanas, pero acompañado por el consejero y el director general de Salud Pública. El presidente, camuflado entre ambos, fue el que menos habló porque, francamente, era el que tenía menos cosas interesantes que decir.
La polémica del vídeo viral que salpica al consejero de Salud Pública también nos ha borrado ahora del mapa al único que se podía decir que daba la cara en esta pandemia. Lo damos por hecho porque su jefa política, Gloria Rojas, relacionó la ausencia mediática de Mohamed Mohand con las imágenes de la paella con amigos. Fue cuando a la líder del PSOE le preguntaron si había alguna razón por la que el consejero no daba rueda de prensa desde el 26 de enero, y ella respondió que si la pregunta era por el vídeo, que Mohand daría todas las explicaciones oportunas en una comparecencia que aún no tiene fecha. Mientras tanto, nos tenemos que conformar con las ruedas de prensa que cada diez días suele dar la coordinadora Covid, que no responde a muchas de las preguntas que le hacen alegando que no sabe porque ni es médico ni trabaja en Salud Pública.
Parece una broma que los melillenses, en la peor crisis sanitaria y económica en décadas, tengamos que aguantar esta falta de transparencia. Unidas Podemos, los socios de Gobierno nacional de quienes cometen estos atropellos contra el derecho a la información de los ciudadanos, también se quejaron ayer de lo que está sucediendo.
Mientras en otros lugares vemos a los cargos públicos dando la cara y tranquilizando a la población, en Melilla tenemos que conformarnos con interpretar estadísticas y bomes en lugar de poder acceder a la información y opinión de quienes tienen máxima responsabilidad de gestionar la pandemia, lo que hace sospechar que tan bien no lo estarán haciendo cuando no quieren rendir cuentas ante la ciudadanía. El bochorno es que algunos de ellos se colocaron en primera fila para la foto hace una semana durante la visita del ministro de Transportes, José Luis Ábalos. Esta era la regeneración democrática que nos prometieron y a la que hasta dedicaron una Consejería a principios de legislatura.

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