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“Donde hay poca justicia es un peligro tener razón” (Quevedo)

Últimamente hay sentencias que me dejan perplejo. No entiendo nada. Hay sentencias condenatorias y absolutorias que desde mi punto de vista no tendrían que ser así. La justicia humana está aplicada por personas que tienen sus condicionamientos ideológicos y creencias. Sus apreciaciones son subjetivas. Cuando dicen que aplican la ley no me lo creo, porque ante un mismo hecho sentencias diferentes. Si la justicia fuera justa, sería veraz, pero no los es, de ahí que dependa de una resolución u otra del juez humano que te toque. Eso los saben bien los abogados que esperan para presentar sus escritos dependiendo del que esté de guardia o al que le toque en el reparto.
En nuestro país hemos tenido ejemplos flagrantes de jueces no justos como Pascual Estevill que llegó a ser miembro del Poder Judicial y terminó en la cárcel por corrupción. Durante mucho tiemplo fue apoyado por la casta judicial.

Esta casta judicial que ahora se manifiesta impunemente intentando deslegitimar al Gobierno porque hay comunistas en él. Este tipo de manifestaciones antidemocráticas están impunes y desde la presidencia de la casta se le pide moderación. Quiero recordarle al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León, que el Partido Comunista fue un elemento fundamental para la llegada de la Democracia a España y que un comunista; Jordi Solé Tura, fue padre constitucional. Por lo que creo que este partido ha hecho más por la democracia que él. Creo que algunos jueces les gustaría que todavía existieran los Tribunales Orden Público. También recordarles a los abogados comunistas asesinados en la Matanza de Atocha. Si tuviera este señor un mínimo de decencia habría dimitido.

Por eso y otras razones no creo en la Justicia. La reciente sentencia del voto por correo en Melilla demuestra que la justicia no es igual para todos. Los partidos políticos que no hayan comprado votos por correo que lancen la primera piedra. Recordarle al meritorio Javier Lence (PP) el encargo del impreso de solicitud de voto por correo (2007) a una imprenta local, anulados dos horas antes de que interviniera la Guardia Civil. Tengo la convicción. que éste es posible origen del fraude en el voto por correo. En Melilla sabemos quiénes son los que se han beneficiado de este fraude electoral. Si estuvieran todos en esta sentencia sería para mí justa.

Me ha sorprendido que VOX y Podemos se alegren de la sentencia condenatoria a dos ciudadanos. Extraña coincidencia. Yo no me alegro, en absoluto. Pero creo que es el momento de legislar adecuadamente para que estos hechos no puedan ocurrir más en Melilla. Esto es lo que hay que demandar: el derecho al voto libre y secreto. Con la actual normativa no se garantiza. Por eso demando al PP y al PSOE que regulen rápidamente este sistema para garantizar el voto por correo verdadero.

Con la sentencia que ha mandado a la cárcel al abominable rapero se está poniendo en cuestión la libertad de opinión. Los delitos de odio y apología del terrorismo que este “señor” transmite en sus letras no deberían nunca quedar impunes. Ahora, me hago la siguiente pregunta: ¿por la libertad de expresión hay que ir a la cárcel? NO, pero ser apologeta e incitar al terrorismo, SÍ. No se deben confundir libertad de expresión y apología terrorista. Lo mismo que no se puede confundir libertad de expresión y ridiculizar a la Monarquía. Desde tiempo inmemorial a la realeza española se le ha vituperado, con razón, por sus excesos. No voy a referirme a hechos recientes (por si acaso hay alguien de la casta judicial que no le gusta). Recomiendo busquen en el google poniendo “Isabel II y el Rey Francisco de Asís”. Se van a sorprender de las viñetas tan obscenas que se publicaban hace más de un siglo y nadie fue a la cárcel.

Quiero condenar la violencia que se ha desatado porque un energúmeno ha entrado en prisión. Desde aquí mi apoyo más férreo a las fuerzas de seguridad. Ellos no son lo agresores, son los agredidos.

PD: Quiero mandarle desde estas líneas un abrazo fuerte a mi amigo Aberchán. No al político.

Señores del gobierno local hagan algo por los pensionistas que reciben tan sólo 400 euros al mes. Defiendan a nuestros mayores.

Sigue sin dimitir el niño maravillas. El PSOE está en la cuerda floja de la ética democrática por mantenerlo. No pidan responsabilidades a los ciudadanos. Aplíquense el cuento.

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