En este año de 2021 se cumple ciento un año de la creación del Tercio de Extranjeros motivo por el cual este y siguientes trabajos serán conmemorando a los heroicos legionarios que dieron su vida por la Patria.
Hechos de Armas que dieron prestigio y renombre al Tercio de Extranjeros, hoy denominado La Legión.
…Tanto los proyectos como el informe de la Alta Comisaría fueron elevados al Gobierno, el que después de pasarlos a estudio del Estado Mayor Central resolvió en sentido denegatorio, es decir, de prescindir totalmente de toda acción militar sobre Alhucemas. Al mismo tiempo comunicó que la línea que hasta entonces tenía la zona oriental habría que cambiarla por otra que sería determinada por dicho Organismo. Asimismo se ratificó en la decisión de que no se realizaran avances militares y la prohibición absoluta de iniciar nuestras tropas ofensiva alguna.
El general Martínez Anido, conforme había anunciado, solicitó, como hemos citado anteriormente, le fuera admitida la dimisión de su cargo, siendo sustituido el 21 de dicho mes por el General de División, Enrique Marzo Balaguer.
Mientras los españoles discutían, Abd el Krim trató de sacudirse el reciente fracaso de Tizzi Assa y Tifaruín concentrando sobre la pequeña posición avanzada de Tifisuin, cerca de la costa de Afrau, fuerzas rifeñas poderosas nunca conocidas hasta la fecha en estos lugares, casi 5000 hombres, con excelente artillería (procedente en gran parte de la capturada a los españoles en 1921). Asesores alemanes forman en su Estado Mayor. Va a ser la prueba de fuego para el emirato del Rif, una vez que el intento institucional del Amalato acaba de fracasar ruidosamente.
Ya sabemos que el año anterior la batalla de Tifaruín se desencadenó bajo el sol implacable de agosto: la guarnición española queda cercada, y la Comandancia General de Melilla tratará durante ocho días angustiosos de socorrerla. Abd el Krim, que por unos momentos creyó encontrarse otra vez en el escenario y el ambiente tórrido de Annual, cometió dos gravísimos errores: «Montar su ofensiva bajo el alcance de los cañones de la flota y creer que el pánico de 1921 iba a repetirse automáticamente en torno a Tifaruín».
También, al año siguiente comete el mismo grave error, atacando la diminuta posición de Tifisuin, cerca de la costa de Afrau, ya que la escuadra, integrada por cruceros, destructores y guardacostas se aproximaba a distancias inverosímiles de aquel litoral mal fijado en las incompletas cartas náuticas de la época. La aviación con treinta y tres aviones bombardeó y ametralló a las harcas. Pero Abd el Krim adelantó sus posiciones hasta casi rozar las de la defensa con lo que pudo eludir buena parte del fuego enemigo desde mar y aire.
ASEDIO A LA POSICIÓN DE AFRAU
El revés sufrido por los rebeldes en Tizzi Assa y Tifaruín, en junio y agosto respectivamente del año anterior (1923), aireado por toda la prensa nacional, hizo desvanecerse el sueño del emirato del Rif y Abd el Krim, siempre espectacular, medita la idea que será su ruina: revolverse contra la Zona Francesa, ya que las zonas españolas, tanto la Occidental como la Oriental eran infranqueables, no sin seguir hostilizando a los españoles en busca de un triunfo prestigiador que gane reclutas para sus harcas diezmadas.
Tan preocupante era el estado general del frente que casi toda la Legión (1ª, 2ª, 3ª y 4ª Banderas) permaneció en su campamento de Ben Tieb donde continuaron con los aprovisionamientos y descubiertas.
Y es precisamente durante este año de 1924 cuando Abdelkrim trata de romper el cerco nuevamente en la zona comprendida entre Afrau y Tifaruín, donde el Mando carece de blocaos, en lugares donde el terreno es muy abrupto, ya que este terreno carecía de condiciones como línea ofensiva, a causa de la dificultad de los abastecimientos.
Por Real Decreto de 10 de mayo de 1924 el general José Sanjurjo Sacanell era designado para sustituir al general Marzo en la Comandancia General de Melilla. El nombramiento de Sanjurjo fue recibido con la natural satisfacción, no solamente por el elemento militar sino también por la población civil de Melilla, que guardaba un recuerdo de gratitud por su actuación en las operaciones de los difíciles días de los meses de julio y septiembre del año 1921.
El enemigo no cejó en su empeño de romper el frente y esta vez lo intenta como ya hemos dicho anteriormente por la zona junto a las proximidades de la posición de Afrau.
El miércoles 13 de agosto el enemigo comenzó a asediar las posiciones de Afrau, cerca de la costa, y Tifisuín, cerca y al Norte de Tifaruín, sorprendiendo a las fuerzas de Afrau cuando iban a efectuar la aguada.
Defendían la posición de Afrau, la primera y tercera compañía y una compañía de ametralladoras del tercer batallón del Regimiento de Melilla, mandadas por los capitanes Félix Mínguez y Cristóbal Núñez y alféreces Luis Quiroga, Rafael Valero, José Mondéjar y Casimiro Tedes. Al frente de la citada posición se hallaba el teniente coronel Eduardo Martínez de Marcos.
Guarnecían la posición de Tifisuín fuerzas de la Mehal-las.
En la Avanzadilla de Afrau (Sidi Hosain), se encontraba el alférez Valero Canmineo, hijo de los condes de Montalbán.
Para contrarrestar al enemigo el general Sanjurjo puso en movimiento tres columnas, mandada la de la derecha por el coronel Alfredo Coronel, la del centro por el teniente coronel Pozas, y la de la izquierda por el coronel Juan Micheo Azúa.
El mando superior de las tres columnas lo ostentaba el general Fernández Pérez. Se operaba de forma parecida a los enfrentamientos del año anterior, junio y agosto de 1923 (Tizzi Assa, y Tifaruín) y mayo de este mismo año en Sidi Mesaud, con grandes fuerzas de choque protegidas por la Artillería y Aviación.
En las primeras horas de la mañana del jueves 14, el general Sanjurjo se trasladó en automóvil a Dar Quebdani, cabecera del sector de la derecha. En la misma dirección salió dos horas antes el jefe de la línea de vanguardia general Fernández Pérez, con su ayudante comandante Triana.
Acompañando al general Sanjurjo, marcharon también el jefe de Estado Mayor coronel Sánchez Ocaña, jefe de la Sección de Operaciones teniente coronel Uzquiano, el comandante Alvarez de Sotomayor y ayudante teniente coronel López Conti, comandante Valenzuela y capitán Martín Alonso.
Mientras tanto, el enemigo no cesaba de hostilizar, cada vez con más intensidad, Afrau, la Avanzadilla de esta posición y Tifisuin.
La aviación, secundada con eficacia por la artillería de nuestras posiciones y la de los cañoneros “Cánovas del Castillo” y “Lauria” y guardacostas “Arcila”, mantuvo a raya a los atacantes en sus frecuentes alardes de acometividad.
Las tres columnas, se pusieron en marcha el viernes 15, siguiendo el camino de la costa la del coronel Alfredo Coronel que iba precedida por la harka amiga de Beni Said al mando del Caid Amar Ouchen.
Una vez más el enemigo intentaba repetir la hazaña de Igueriben, para lo que eligió en esta ocasión las posiciones de Afrau y Tifisuin, colocándose a retaguardia de las mismas en terreno quebradísimo en el que se atrincheró fuertemente, y eligiendo el caluroso mes de agosto.
Las columnas izquierda y centro pernoctaron la noche del viernes en Farha, y la de la derecha lo hizo en un vivac establecido en el camino de la costa entre Timayast y Afrau.
Durante todo el día del viernes las baterías de las posiciones y las de los barcos de la Marina de Guerra, hicieron nutrido fuego sobre los lugares en que se había concentrado el enemigo.
En los crestones que dan frente a la playa, los harkeños habían construido tres frentes de cuevas, hábilmente disimuladas, dispuestas muy especialmente para impedir o dificultar un desembarco en aquella zona.
En las primeras horas de la mañana del sábado 16 comenzaron su movimiento de avance las tres columnas, entrando muy pronto en contacto con el enemigo que fuertemente atrincherado, defendía tenazmente las madrigueras donde se había amparado.
El general Sanjurjo que con su cuartel general estaba en Dar Quebdani desde el día anterior dando disposiciones para la organización de las columnas y su intervención en el combate, se trasladó a Farha para poder seguir más de cerca las incidencias de la lucha.
El general Fernández Pérez marchó con la columna del centro para conservar el máximo enlace con las otras dos.
EL EJÉRCITO HOMENAJEA A SUS HÉROES PONIENDO SUS NOMBRES A LOS BLOCAOS
Narrábamos anteriormente las diferentes fases de las operaciones desarrolladas por nuestro Ejército, durante la reconquista del territorio tras el ignominioso desastre de Annual.
A continuación nos centraremos en el comportamiento y buen hacer de nuestra aviación durante los combates de Afrau; la condecoración militar otorgada por el Estado Español y que se le impuso al CAID AMARUCHEN “EL LOBO”; Los lugares y puntos fuertes situados entre SIDI MESAUD y AFRAU…
Finalmente conoceremos la relación de BLOCAOS y posiciones, así como datos relacionados con sus nombres y el porqué de ellos, igualmente ofrecemos a los amables y pacientes lectores, que semana tras semana siguen nuestras vicisitudes, datos biográficos del Capitán del Tercio, Juan San Miguel Rasilla… Y para concluir, esperamos que el presente trabajo, haya sido del agrado de todos.
EL COMBATE DEL SÁBADO 16
Los rebeldes en crecido número, aprovechándose del quebradísimo terreno, que había mejorado a su favor construyendo cuevas, zanjas y pozos de tirador, se oponía con tesón al avance de las columnas de socorro, que como hemos dicho anteriormente eran auxiliadas muy eficazmente por la aviación, la artillería de acompañamiento, la de las posiciones, el grupo de obuses de 155, establecida en Kadia (Dar Quebdani), y los cañones de los buques de guerra.
La columna de la derecha chocó con el enemigo atrincherado, entablando un encarnizado combate, siendo reforzados con fuerzas de la columna del coronel Juan Micheo que también sostuvo un combate duro, habiendo de registrar el momento hermoso en la columna mandada por el Alfredo Coronel, que procede a un enérgico ataque a la bayoneta con ayuda de legionarios de la columna mandada por el coronel Micheo, ataque que fue necesario dar ante la presión del enemigo. Pero el empuje fue tan enorme y arrollador, que aquel fue desalojado de los barrancos en que estaban, cogiéndole más de doce muertos con armamento, algunos prisioneros y fusiles sueltos. En esta misma tarde, la columna del teniente coronel Pozas o sea la de la izquierda, asaltaba todas las lomas al Noroeste y al Oeste de Tifaruín, próxima ya al barranco de Tifisuin.
Muy avanzada la tarde y conseguido casi por completo los objetivos de las columnas que era desalojar al enemigo de los lugares que ocupaban, se dio orden a las tropas por considerarlo oportuno el Mando, detener la operación en aquellos momentos y que se vivaqueara sobre el terreno montando perfectamente los servicios de seguridad.
La noche transcurrió sin la menor novedad, siendo aprovechada por los rebeldes supervivientes de la lucha, para filtrarse entre los puestos avanzados y huir sigilosamente.
Quien no haya estado nunca en el lugar, se podrá imaginar algo sobre lo abrupto del terreno, pero jamás podrá hacerse una idea de lo verdaderamente difícil que tuvo que resultar moverse por aquellos parajes inhóspitos, llenos de barrancadas, caminos intransitables, siendo secos, con lluvia, inaccesibles tanto para personas, bestias de carga o vehículos de motor, máxime cuando el hostigamiento a nuestras fuerzas se realizaba con artillería pesada capturada a los españoles en 1921. Dificilísimo tuvo que ser para nuestras tropas el poder desenvolverse por aquellos parajes.
Quizás Abdelkrim, esperaba encontrarse en aquellas latitudes el ambiente tórrido de Annual y posiblemente repetir la hazaña de Igueriben, para lo cual emplearon las misma tácticas: Cuevas, zanjas y pozos de tirador…
Pronto las fuerzas españolas se acostumbraron a aquel terreno, que estamos seguros de que los miembros de la Asociación de Estudios Melillenses y los nativos del lugar hemos sido los únicos en volver a pisar desde aquellos cruentos combates y que posiblemente no vuelvan a ser hollados por ningún otro colectivo en mucho tiempo.
Con las primeras claras del domingo día 17, se pusieron simultáneamente en marcha desde sus vivac las tres columnas, avanzando en el más perfecto orden, y con movimientos también combinados, que, barriendo materialmente al numeroso enemigo que en vano trataba de impedir el movimiento de nuestras tropas, bien pronto consiguió liberar la posición de Tifisuin la columna de la izquierda, mientras la de la derecha alcanzaba Afrau. El impulso de ambas columnas, fue apoyado con la intrepidez ya famosa y de todos conocido, de las Banderas de la Legión que iban en la columna del centro, y que quedaron dueños de todos los poblados de Tifisuin en combinación con los Regulares de la columna de la izquierda… (Continuará)
Bibliografía consultada al final del último capítulo
