La vocal del Colegio de Médicos, Teresa Sagrario, ha hablado acerca de la situación de elevado contagio de la ciudad de Melilla y de lo que es probable que suceda después de Semana Santa por las reuniones y desplazamientos que se esperan a la península. “La situación actual de Melilla es un falso aislamiento. Aunque se dice que las fronteras con la península están cerradas, aquellos que quieren viajar lo hacen sin ningún problema. Este flujo de desplazamientos debería de estar mucho más controlado debido a la situación que tenemos en la ciudad, puesto que somos el número uno en tasa de incidencia a nivel nacional”, ha explicado la vocal del Colegio de Médicos a este periódico.
En este sentido, Teresa Sagrario ha afirmado que además de las restricciones de horarios que se están manteniendo, es necesario un cierre perimetral estricto que no se está cumpliendo como debería. “Es cierto que se están poniendo medios, pero estos deberían ser más duros y exigentes”.
Respecto al lento proceso de vacunación que se está viviendo en España, ha indicado que Melilla tendría que tratarse como ejemplo de vacunación y cierre perimetral por su pequeño tamaño para estar en una situación similar a Canarias o Baleares. “No puede ser que las islas tengan unos datos tan buenos y nosotros, no”, ha sentenciado.
Por otra parte, la vocal del Colegio de Médicos ha indicado que, además de los problemas que parece estar ocasionando la administración de la dosis de AstraZeneca, las vacunas de otras farmacéuticas no están llegando con la velocidad que desearían. “Hay grupos que no están siendo vacunados, como, por ejemplo, trabajadores que ayudan a los médicos y enfermeras de la sanidad privada. Estos pertenecen al grupo 3 y se los han saltado. Lo mismo sucede con los higienistas dentales y sus auxiliares, solo están vacunados los odontólogos. Esto muestra un trato discriminatorio hacia los empleados que debería ser estudiado”.
Ante esta situación, ha reconocido haber realizado un escrito a Salud Laboral para denunciar lo que está pasando puesto que en su propia clínica ella está vacunada, pero sus empleadas auxiliares y enfermeras, no. “Como yo, hay muchos otros sanitarios que tienen a sus trabajadores sin vacunar”, ha aclarado.
Qué pasará tras Semana Santa
“Los datos de Melilla muestran que estamos abocados a entrar en una cuarta ola después de Semana Santa sin haber tenido apenas tiempo de recuperarnos de la tercera y sin poder preparar de forma oportuna las medidas del Hospital, viendo que además las vacunas no están llegando como deberían”, ha explicado acerca de lo que sucederá en las próximas semanas.
En este sentido, ha destacado que Semana Santa se asemejará a la pasada Navidad por los días festivos, lo que ocasionará el alza de los contagios de Melilla. “Por un lado, están los que saldrán de la ciudad y, por otro, los que se quedarán en ella, pero ambos bajarán la guardia respecto a las medidas de contención. De ahí el miedo a la ola que pueda venir después de estos días porque es un hecho que, después de una disminución de los casos, puede volver a haber una subida, sobre todo teniendo en cuenta que el nivel de vacunación para alcanzar la inmunidad de rebaño no lo estamos alcanzando”.
Por otra parte, respecto a la movilidad de los estudiantes y otros sectores de la población durante Semana Santa a la península ha indicado que una buena opción para controlar los contagios sería que estos mostrasen una PCR o un test de antígenos de vuelta a Melilla para que se vean en la obligación de tener precaución respecto a contagio del virus.
