Un agente de la Policía Nacional que se encontraba fuera de servicio ha intervenido en Melilla seis paquetes de hachís, con un peso total de 600 gramos, que acababan de ser lanzados desde Marruecos por encima de la valla fronteriza. En una nota de prensa, la Jefatura Superior de Policía de Melilla ha informado de que esta actuación contra el narcotráfico se produjo el pasado día 1 por la tarde, cuando el agente estaba practicando deporte en las proximidades de la valla fronteriza, cerca del paso de Barrio Chino. En ese momento, observó un movimiento sospechoso al otro lado de la frontera y, poco después, escuchó objetos que caían al suelo desde cierta altura.
Inmediatamente, se dirigió al lugar concreto y observó cómo dos jóvenes que estaban cerca salieron corriendo en distintas direcciones, no pudiendo darles alcance.
Buscan a los jóvenes
El agente avisó a las dotaciones policiales a través del CIMACC 091, regresó a la zona, recogió seis placas plastificadas que contenían una sustancia sólida vegetal de color marrón verdoso, al parecer hachís, y se las entregó a una de las patrullas.
Cada uno de los paquetes contenía 100 gramos de droga, por lo que se instruyeron diligencias que fueron remitidas al juzgado de guardia.
Las gestiones para la identificación de los jóvenes han resultado infructuosas hasta el momento.
