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Los hosteleros ven “ensañamiento y alevosía” en las medidas de la Ciudad, que los sitúa como “culpables”

La Asociación de Hostelería de Melilla acusó ayer al Gobierno de la Ciudad Autónoma de “ensañamiento” contra el sector dictando unas nuevas medidas anticovid que obliga a cerrar el interior de sus establecimientos por el repunte de contagios, al mismo tiempo que amplía el horario del comercio. Miembros de la junta directiva de esta entidad, encabezados por su presidente, Chakib Mohamed, se concentraron ante el Palacio de la Asamblea y, de manera simbólica, expresaron su rechazo a la nueva orden de Salud Pública rompiendo platos, cuyos pedazos, posteriormente, recogieron del suelo ante la prensa.

“La hostelería no va a pagar los platos rotos”, dejó claro Mohamed para, a continuación, estrellar contra el suelo los platos que llevaban. Lo hizo justo después de acusar al Ejecutivo melillense de publicar unas medidas “contra el sector de la hostelería con ensañamiento, alevosía, nocturnidad y premeditación”.
“Arremeten contra nosotros con crudeza y sin comunicación ni ningún tipo de reunión”, lamentó el presidente de la Asociación de Hostelería para expresar el rechazo del sector a la forma en que ha actuado el Gobierno melillense, publicando la orden en el Boletín Oficial de Melilla (BOME) y comunicando las medidas después “para justificarse”.
Mohamed dejó claro que las medidas, aunque aluden al interior de los locales, en realidad no afectan solo a ese ámbito, sino que “va contra todo el sector” porque, como recordó, anteriormente ya se dictaron otras que limitaban otras cuestiones, como el uso de la barra, el ocio nocturno o el número de mesas permitidas.

“Vendedores ambulantes”
Lamentó que, con esta nueva orden de Salud Pública, habrá hosteleros que ni siquiera puedan seguir abriendo al carecer de terrazas, como es su caso particular y el de otros restaurantes, cuya actividad se desarrolla dentro del local, pues insistió en que las terrazas “son un suplemento” para el sector.
En este sentido, acusó al Gobierno de Melilla de pretender que los hosteleros se conviertan en vendedores ambulantes, desarrollando su actividad en la calle, y consideró que no es lógico cuando el sector del comercio, que también funciona dentro de locales, ve ampliado, sin embargo, el horario de funcionamiento en dos horas más.
“Han querido separar al sector de la hostelería y han conseguido todo lo contrario, la unión total, y han querido separarnos del resto del sector del comercio”, afirmó Chakib Mohamed en su acusación contra el Gobierno de Melilla, al que recordó que la hostelería “es el sector más importante de la ciudad”.
Los reproches del presidente del gremio fueron dirigidos a todos los miembros del Ejecutivo melillense y no solo a los responsables de gestionar directamente la pandemia en el aspecto sanitario, dejando claro que habla de los tres socios de Gobierno y todas las áreas que lo conforman.
De esta manera, Chakib Mohamed rechazó el argumento empleado por algunos que alegan desconocimiento de lo sucedido o que responsabilizan al presidente o al consejero de Salud Pública, actitud que considera “una vergüenza” porque se trata de una orden muy importante para la ciudad que afecta a gran parte del tejido productivo.
El presidente de la Asociación de Hostelería lamentó, asimismo, las dificultades que conlleva para el funcionamiento de sus establecimientos limitar la actividad a las terrazas, ya que eso les obligará a estar pendientes de la climatología justo en la época donde suele ser más adversa, en los meses de abril y mayo, y les impide hacer previsiones en los suministros.

“Desastre”
Mohamed pronosticó que estas medidas, que “no son razonables ni atienden a nada”, les aboca al “desastre” y se preguntó de qué ha servido la inversión de varios miles de euros realizada para convertir los establecimientos hosteleros en espacios seguros, con medidores de dióxido de carbono.
Al hilo, explicó que, en su caso particular, que se trata de un local con poca ventilación, el medidor no llega a los 500 miligramos por metro cúbico, siendo el máximo permitido 800, pero, sin embargo, “en el interior de los aviones la medición llega a 8.500 y no los cierran, como tampoco los barcos, que han trasladado a 6.900 personas en un día”.
En opinión del presidente del gremio, en estas cosas es donde se ve la “injusticia” que, a su juicio, se está cometiendo con la hostelería, culpabilizándola de la situación cuando no hay datos, asegura, de que se hayan producido brotes de covid en ninguno de los establecimientos de Melilla, muy controlados con una trazabilidad cuando hay casos de hepatitis por consumo de moluscos.
Cree que esto sucede porque “lo más fácil es destinar esa responsabilidad a los hosteleros”, sin centrar la atención en incumplimientos de otras medidas que, asegura, se están produciendo, como el cierre perimetral, pues días atrás “se ha permitido que 16.000 personas se vayan” de Melilla, y se está dando la proliferación de fiestas particulares y “garitos”.
En cambio, han transcurrido siete meses desde que se ha decretado el cierre de un local de hostelería por incumplimiento de las normas, pero “han tardado cinco minutos en cerrar todos los interiores”, algo que para la asociación no tiene lógica y supone que el equipamiento de los establecimientos con medidores “no ha servido para nada”.

“Lo que necesitamos son vacunas y ni Salud Pública ni la Delegación del Gobierno hablan de ellas”

En sus declaraciones, Chakib Mohamed lamentó que ni el área de Salud Pública de la Ciudad Autónoma ni la Delegación del Gobierno estén hablando de vacunas, que es “lo que necesita” Melilla para ser inmunizada con una campaña masiva como la que pidió la asociación hostelera, emulando la estrategia que se ha seguido en Gibraltar.
Frente a ello, criticó que los encargados de gestionar la pandemia estén “erre que erre” repitiendo las medidas que ya estaban en vigor y restringiendo aún más varias de ellas. Ante ello, mostró la “indignación, impotencia y frustración” que sufre el gremio tras conocer la nueva orden de Salud Pública.
Lamentó que no se les comunicara con antelación, “aislando” al sector de la hostelería, pues según dijo Chakib Mohamed, tienen constancia de que el Gobierno local, que sigue “una política tipo sheriff”, sí se reúne y dialoga con otros gremios.

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Redacción

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