Sobre las carencias de los suyos, el míster melillense cree que tuvieron “bastantes problemas para frenar a Vilà”, así como reconoció que les “faltó defensa” y que se mostraron “inferiores en el uno contra uno”. Tampoco estuvieron acertados “en anotación en el tercer cuarto” y no fueron “capaces de generar segundas opciones”, destacó. Alejandro Alcoba comenzaba su comparecencia de prensa, al término del partido disputado en Huesca, felicitando al rival y calificando la victoria de los oscenses de “merecida”. Ya centrándose en la valoración del encuentro, el técnico del Melilla Sport Capital Baloncesto considera que la primera parte fue “muy competida” y en la que los aragoneses “trabajaron mucho en el poste bajo, a través de Vilà”, mientras que a ellos les daba buen resultado “el bloqueo directo”.
Sobre las carencias de los suyos, el míster melillense cree que tuvieron “bastantes problemas para frenar a Vilà”, así como reconoció que les “faltó defensa” y que se mostraron “inferiores en el uno contra uno”. Tampoco estuvieron acertados “en anotación en el tercer cuarto” y no fueron “capaces de generar segundas opciones”, destacó.
Sin duda, demasiados puntos débiles para un decano que acabó sucumbiendo claramente a partir del tercer periodo, en el que el Levitec Huesca fue “más constante”. Hasta el tiempo de descanso, a su juicio, había quedado claro que “los dos equipos querían ganar y permanecer en la categoría, siendo un querer y no poder por parte de ambos hasta el intermedio”.
A pesar de este nuevo tropiezo, Alcoba no quiso señalar a ninguno de sus jugadores, ya que cree que no puede “reprocharles nada” porque “se vaciaron”, faltándoles “acierto en ataque y dureza en defensa en algunos momentos del choque”, explicó.
Por último, el entrenador azulón lanzó un mensaje de realismo de cara al futuro inmediato: “Estamos viviendo una situación complicada que debemos aprender a gestionar, porque restan tres finales y la lucha por el descenso es una realidad”.
