El Sindicato Autónomo de Trabajadores de la Enseñanza de Melilla (SATE-STEs) ha denunciado la situación en la que se encuentran muchos profesores puesto que todavía no han sido vacunados y se encuentran constantemente expuestos. Asimismo, han criticado que muchos docentes no hayan sido vacunados por el cambio en los grupos de edad establecidos por el Gobierno, por los que menores de 60 años no han recibido la dosis o los profesores universitarios a los que no se les ha considerado “personal esencial”. Por ello, ante tal situación de incertidumbre, han demandado que se dé una información clara a los docentes y se solucione esta situación. El sindicato SATE-STEs ha denunciado la situación por la que mucho profesores aún no se han vacunado contra el covid-19. Asimismo han indicado que hay docentes menores de sesenta años que han recibido la primera dosis de la vacuna de Astra Zeneca y otros de distintas edades que no han recibido ninguna dosis, bien porque habían resultado contagiados o por cualquier otra circunstancia que se lo impidió en su momento. También han hecho referencia a los docentes del ámbito universitario, quienes no son considerados personal esencial. “Todos tienen en común vivir en un limbo que los tiene sumidos en la incertidumbre y el temor de no saber cuándo ni con qué se les va a completar o realizar el proceso de vacunación”, han destacado.
En este sentido, han criticado el hecho de que se prolongue otras cuatro semanas la decisión sobre la administración de la segunda dosis de Astra Zeneca a los menores de 60 años, sin más información a los afectados que la que proporcionan los medios de comunicación y sin garantías de que la decisión no entre en el bucle de “hoy se fía. Mañana, no”.
“Esta incertidumbre, producto de una incomprensible falta de información clara por parte de los responsables, se une un nuevo denominador común de todos estos colectivos en general y de cada uno de sus individuos en particular: trabajar en espacios cerrados; durante largos períodos de tiempo, rodeados de grupos de personas numerosos; en algunos casos, como en las aulas de infantil, sin que el alumnado lleve la más básica medida de seguridad, la mascarilla, a pesar de la imprescindible cercanía para desarrollar correctamente la labor docente en estos grupos; trabajar con alumnado cuya práctica totalidad no sido aún vacunado ni lo va a ser en breve por razón de su edad. Como el conjunto de los compañeros y compañeras, SATE-STEs no comprende que a estas alturas no se haya tenido en cuenta esta circunstancia para agilizar el proceso de vacunación entre los docentes pendientes de recibirla o de que se les complete la pauta, sobre todo ante el incierto panorama que el fin de determinadas medidas amparadas en el estado de alarma nos puede deparar”, han afirmado.
Por ello, han destacado que la incidencia acumulada a 14 días del 30 de abril en los centros educativos ha subido hasta quedar muy levemente inferior a la general, lo que hace más necesario que nunca completar este proceso de vacunación.
