A lo largo del pasado año 2013 el Comedor San Francisco dependiente de la Consejería de Bienestar Social y Sanidad elaboró algo más de 253.000 raciones de alimentos para atender a personas mayores que viven solas y familias melillenses sin recursos. El viceconsejero Hassan Driss afirma que si fuera necesario se ampliarían a mil las raciones diarias a repartir. Según comentó el viceconsejero de Servicios Sociales, Hassan Driss, el Comedor Social San Francisco elaboró el pasado año 2013 algo más de 253.000 raciones de alimentos para personas mayores sin recursos o que viven solas, personas acogidas en el albergue y principalmente, familias melillenses con escasos o nulos recursos económicos. La cifra pone de manifiesto el recrudecimiento de las consecuencias de la crisis económica y la necesidad de dar respuesta a las necesidades de personas que se ven obligadas a recurrir a los servicios sociales en busca de ayuda.
Explicó Hassan Driss que el comedor elabora actualmente 800 raciones diarias de alimentos, prácticamente el doble que hace dos años, pero indicó que si fuera necesario se llegarían a las mil raciones diarias. "Tenemos capacidad para ello, y de hecho el comedor trabaja mañana y tarde, pero en el caso de que incluso esas mil supuestas raciones fueran insuficientes, se haría todo lo posible por incrementarlas al objeto de dar respuesta a la demanda", dijo. Además de las raciones, las familias reciben también bolsas de alimentos para la cena y el desayuno, con productos especiales para los niños, y también para los fines de semana. "Si hay niños, incluimos zumos pequeños, dulces o paquetes de galleta para el desayuno y la merienda en el colegio".
Calidad
Afirmó el viceconsejero que todos los años la Consejería de Administraciones Públicas realiza una encuesta a los usuarios del comedor, sobre la calidad de los alimentos y las raciones, habida cuenta de que la entidad cuenta con su propia carta de servicios en la que se compromete a una constante mejora en la calidad de su labor. Las encuestas, indica Hassan Driss, arrojan de forma mayoritaria resultados muy positivos sobre la calidad del servicio. Las encuestas, además de que el personal de Servicio a Domicilio suele interesarse por lo que opinan los usuarios sobre las comidas, buscan "poder corregir los fallos que puedan existir".
Indicó que también se han recibido quejas, "muy pocas", en especial de los usuarios del Servicio de Ayuda a Domicilio, sobre que "que la comida tenía mal gusto o que les ponían demasiada sopa o purés por la noche, pero es que para cenar no podemos darles platos muy pesados y elaborados, y por eso se busca darles un puré o una sopa, con jamón cocido y postre".
