El director general del Imserso, César Antón Beltrán, finalizó su estancia de dos días en Melilla con varios anuncios. En primer lugar, afirmó que antes de finales de año se adjudicarán las obras para acondicionar las dos plantas superiores del futuro Centro de Discapacitados Físicos en la Calle Polavieja. El coste supera los 200.000 euros. La idea es que pueda abrir en el primer trimestre de 2015 y ofrecer, en principio, servicios de atención ambulatoria. Por otra parte, señaló que se ha elaborado un nuevo pliego para el programa de ayuda a domicilio que se ofrece con la intención de incorporará terapias ocupacionales para la prevención de dependencias; y en determinados casos, atención de fisioterapia. El coste será de 1,7 millones de euros al año. Recordó César Antón Beltrán que el motivo de su visita a Melilla era conocer los centros, profesionales, servicios y prestaciones que el Imserso (Instituto de Mayores y Servicios Sociales) gestiona en la ciudad al objeto de atender las necesidades de personas mayores y personas dependientes y con discapacidad. En estos dos días de estancia ha tenido ocasión de visitar los centros, de hablar con trabajadores, usuarios y de conocer sus demandas e inquietudes. El director general del Imserso quiso agradecer "el trabajo y esfuerzo" de todos los profesionales que desarrollan su labor en la ciudad, porque a pesar de "momentos difíciles, han realizado esfuerzos importantes para mantener servicios de calidad".
Centro de Dependientes
Tres son los asuntos centrales que le trajeron a Melilla. El primero de ellos es el Centro de Recursos de Promoción de la Autonomía Personal, el Centro de Dependientes o Centro para la Discapacidad Física que se ubicará en el edificio de la antigua residencia de la calle Polavieja. Según dijo, cuando el PP asumió el Imserso se encontró con que no se había finalizado la rehabilitación del inmueble, por lo que no se podía recepcionar la obra, y aunque se han llevado a cabo algunas actuaciones, no se ha puesto en servicio porque "no se podía garantizar que se tuvieran todas las garantías técnicas y legales para entrar".
Por ese motivo se ha redactado un nuevo proyecto de actuación para reforzar la estructura de las dos plantas superiores del edificio que no se incluyeron en la reforma primitiva. El coste supera los 200.000 euros, algo más de la mitad de la partida prevista para 2014 en el capítulo de inversiones de Imserso para Melilla. Según César Antón Beltrán, cumplidos los plazos, se prevé que la obra esté adjudicada antes de fin de año y que los trabajos tengan una duración de unos dos o tres meses. Esto garantizaría que en el primer trimestre de 2015 pueda entrar en servicio.
Consciente, dijo, de que la atención a las personas con discapacidad física es una de las necesidad que presenta Melilla, la idea es que el centro se dedique a estos fines. "En principio, ofrecería una atención ambulatoria en horario de mañana. La intención sería ofrecer terapias ocupacionales, o de la autonomía personal, que podrían compartirse con alguna formación, pero lo cierto es que estamos diseñando el modelo", explicó.
Dependencia y ayuda domicilio
Otro aspecto sobre el que tenía interés en conocer in situ era el competente a la gestión de la atención a la dependencia en Melilla. Los resultados "no pueden ser más positivos", según dejó de manifiesto. El motivo es que en los dos últimos años, se ha mejorado en tres indicadores: "hay más personas a 31 de diciembre con prestaciones reconocidas y recibidas, que en diciembre de 2011. En concreto son 943 los perceptores. Los usuarios han recibido mayores prestaciones de servicios, que tienen que ver con la generación de empleo y se ha hecho un esfuerzo importante en reducir la lista de personas pendientes de recibir una prestación. Había 131 personas y ahora son 70, lo que supone una mejora del 46%. Hay que seguir en esta línea para que estas personas no tengan que esperar tanto tiempo. Pero estas cifras están por encima de la media nacional, que ha tenido una mejora del 36%". El gasto de la atención a la dependencia, afirmó, es actualmente de 4,5 millones de euros en Melilla, cifra que supera la partida fijada en el último ejercicio.
El tercer asunto que le traía a la ciudad era conocer las prestaciones del programa de ayuda a domicilio y el de teleasistencia, que ofrece Imserso de forma integral a los beneficiarios de la Ley de Dependencia, algo que según afirmó sólo ocurre en nuestra ciudad. Pero aún así, anunció que de cara al próximo contrato de ayuda a domicilio se pretende incorporar dos servicios más: terapias ocupacionales que contribuyan a la promoción y autonomía personal, prevención de dependencias o retraso de situaciones de dependencia; y en determinados casos, incorporar atención de fisioterapia. "Será un proyecto pionero de atención integral a las personas con dependencia". El nuevo contrato está aún en licitación y el gasto será de 1,7 millones de euros al año.
Residencia
A preguntas de los periodistas, el director general del Imserso manifestó que por el momento no es posible ampliar la plantilla de trabajadores de la residencia de mayores y, con ello, ocupar nuevas plazas de residente. La normativa estatal aprobada en el año 2010 de medidas de control del déficit público establece que sólo en casos de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, Sanidad, Educación y Lucha contra el Fraude, se podría de forma reglada aumentar las plazas de empleados, por lo que en el caso de la residencia "únicamente pueden cubrirse las vacantes" que se produzcan. En este sentido, "lo único que podemos hacer es acelerar la ocupación de las vacantes".
No obstante, señaló que "no dejaremos de buscar si hay alguna forma excepcional para cubrir esa plantilla necesaria para que el centro esté en plena ocupación". Reconoció que "no es fácil, porque no es una cuestión de presupuestos, porque se buscaría, sino de buscar argumentos legales para poder hacerlo".
Actualmente en la Residencia hay ocupadas 132 plazas de dependientes, 8 de no dependientes, 7 de estancia temporal y 13 diurnas, y el Imserso, según señaló hace unas semanas la directora territorial, Isabel Quesada, cuneta con una lista de espera de 45 personas, que podrían optar a la residencia, a la Gota de Leche e incluso al Gámez Morón.
