Cáritas Interparroquial renovó ayer los convenios de colaboración con las consejerías de Educación y Bienestar Social que posibilitan el desarrollo de las colonias urbanas, una programación que permite a niños de familias sin recursos disfrutar de campamentos de verano durante el mes de julio, en los que se mezclan las actividades lúdicas con las de refuerzo educativo. Ambas consejerías aportan 58.900 euros en este programa. Unos 220 menores de entre 6 y 12 años participan en las colonias urbanas, atendidas por un grupo de más de setenta voluntarios melillenses y peninsulares.