El ministro de Administraciones Públicas, Jerónimo Saavedra, anunciaba que recibiría en julio, por separado, a los alcaldes y portavoces municipales de Ceuta y Melilla, para conversar sobre la autonomía pendiente. La reunión se producía como consecuencia de una petición ceutí y sólo a última hora se incluyó a Melilla.
El Pleno del Ayuntamiento aprobaba por unanimidad y con carácter extraordinario, el convenio con la Gerencia de Infraestructura de la Defensa, lo que supondría una inversión de 800 millones de pesetas en la adquisición de suelo público. Mediante este acuerdo se esperaba que fuese factible solucionar el problema de los 120 vecinos de Corea.
La Comisión Islámica administraría el cementerio musulmán con una ayuda municipal de seis millones.
