El homenaje a los hombres del mar, en la Plaza de los Pescadores, se inició este año con la novedosa iniciativa del estamento militar de que los hombres de la mítica Compañía de Mar sacaran en procesión, desde la Castrense, unas andas con una pequeña talla de la Virgen del Carmen que, seguida por cuantos melillenses quisieron, fue conducida hasta la Plaza donde fue recibida por hombres, mujeres y niños.
El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan José Imbroda, previo a la colocación de la corona de flores junto al pesquero que preside la plaza, dejó de manifiesto que un año más los melillenses se reunían para rendir homenaje a los hombres del mar, a todos aquellos melillenses que a lo largo de los tiempos han perdido la vida en el mar. “Recordamos así a personas que hicieron del mar un mundo importante en sus vidas y que también contribuyeron a hacer que Melilla fuera a mejor”. En este recuerdo emocionado a sus seres queridos se sumaron familiares de los hombres del mar, depositando flores a los pies de la virgen y del pesquero que luce los nombres de todas las embarcaciones que un día formaron parte de la flota pesquera melillense.
Como colofón, la Banda de Música de la Comandancia interpretó la salve marinera coreada por cuantos se reunieron en la plaza de los sufridos y anónimos pescadores de Melilla.
