La Federación de Servicios, FES-UGT, a través de su responsable José Luis Faus, ve "inmoral" lo que considera una "maniobra" el comportamiento de Serramar. La empresa, antigua adjudicataria del servicio de vigilancia del CETI, "debe cantidades ingentes de dinero" a estos trabajadores, "dice no tener dinero para abonar las nóminas" y, en cambio, según Faus, crea tres empresas a nombre de su hija para hacerse con los servicios.
"Esta federación tiene conocimiento por fuentes fidedignas" de que el dueño de Serramar ha creado "tres empresas a nombre de su hija". En una de ellas, según Faus, ha invertido 70.000 euros, en Badajoz y en las otras dos, 3.000 en cada una. Para el responsable de FES-UGT en Melilla, es "un despropósito, una inmoralidad y reírse a la cara de los trabajadores a los que están haciendo pasar un infierno". Desde UGT, denuncian que Serramar está a punto de echar el cierre y de que estas otras empresas intentando "captar" a sus clientes, advirtiendo de que "son el mismo perro con distinto collar", por lo que el sindicato espera que la administración ni ningún cliente "cometa la imprudencia de contratarlas".
