El PSOE de Melilla se ha comprometido a atender las necesidades de la ciudad de "cambiar, modernizarse y afrontar una doble transición política y económica". Así lo apuntó ayer su secretario de Organización, Francisco Vizcaíno, quien subrayó que "Melilla necesita un cambio que responda al principal desafío social que es la falta de trabajo, la pobreza laboral y la desigualdad social". "Por eso el Partido Socialista es más necesario que nunca porque es el partido del cambio que necesita Melilla y España". El número tres de los socialistas locales aseguró que los socialistas tienen "un proyecto de mayorías que responde al deseo de cambio y modernización que quieren los melillenses". "Los socialistas tenemos un programa para frenar la apisonadora de derechos del PP y apostar por la innovación, la competitividad y favoreciendo el crecimiento de las pequeñas y medianas empresas".
El dirigente socialista defendió una reforma fiscal "con un sistema fiscal más justo, más eficiente, más sencillo y sobre todo que garantice el Estado del bienestar", y rechazó la reforma del PP por ser "doblemente regresiva, doblemente injusta, doblemente perjudicial para la clase trabajadora y la clase media porque beneficia a quien más tienen y anticipa recortes en el corazón de la cohesión social española: la educación y la sanidad".
Aseguró que enfrente estará el PSOE con "una alternativa para rebajar impuestos a los trabajadores, la persecución de los defraudadores y la prohibición de las amnistías fiscales, porque, hasta ahora, con el Gobierno de Mariano Rajoy, a la clase media y trabajadora les preocupa que les ha tocado pagar la crisis y el Gobierno quiere hacerles pagar también la salida de la crisis con más impuestos".
