A los Gabi González les toca corregir errores y pensar ya en el siguiente compromiso ante el Santa Fe en tierras granadinas. La Peña Barcelonista tuvo el peor debut imaginado en la tarde de ayer, ya que fue derrotado por un rival, el Atlético Linares, que no dio prácticamente ningún tipo de opción a los melillenses.
Lo cierto es que la primera parte de los azulgranas fue para olvidar, saliendo muy fríos y con muy poca intensidad a la pista de juego, lo que fue aprovechado por los andaluces, quienes mostraron una gran eficacia de cara a la portería contraria, para marcar dos tempraneros tantos, en los minutos 1 y 3, obra de Domi y Pezzini. Los de Gabi González sintieron el mazazo y estuvieron durante muchos minutos totalmente fuera del partido.
Los visitantes siguieron a lo suyo, con gran seguridad en defensa y no dando demasiadas concesiones a un adversario que, por otra parte, apenas dio señales de vida ofensivamente. Así, Pezzini establecía el 0-3 en el minuto 8, pudiendo incrementar este mismo jugador su cuenta goleadora un minuto más tarde con un balón al palo. Pablo Avellaneda dispuso de la oportunidad de reducir las distancias con un disparo, tras un servicio de Ventura, que sacó el cancerbero linarense. En la recta final de este primer periodo llegarían dos goles más, el 0-4 conseguido por Javi Melero, en el minuto 16, y el tanto del honor de la Peña Barcelonista, siendo el autor del mismo Pablo Avellaneda, al transformar un penalti cometido sobre Mohtar. Con el más que inquietante 1-4 se fueron los equipos a los vestuarios.
En la segunda mitad muy poca historia, prácticamente sólo hasta la consecución del 1-5. Hasta ese momento los de Gabi González lo habían intentado de todas formas, pero con más corazón que cabeza. Además, los numerosos errores atrás penalizaron a una escuadra local que tampoco encontraba la forma de batir la meta linarense, pese a que sí que es cierto que gozaron de un par de oportunidades en las botas de Javi Varea o Moha e incluso enviaron dos balones a los palos.
El Atlético Linares, al contraataque, terminó fulminando a los peñistas, que fueron recibiendo mazazo tras mazazo en forma de goles, algunos de muy bella factura, hasta el definitivo 1-8.
El público melillense despidió con aplausos al equipo linarense que no pudo causar una mejor impresión en su visita al Pabellón Lázaro Fernández. A los Gabi González les toca corregir errores y pensar ya en el siguiente compromiso ante el Santa Fe en tierras granadinas.
