Melilla Acoge llevó este año a la Plaza Menéndez Pelayo la merienda solidaria con el objetivo de que recoger alimentos no perecederos que se entregarán a las religiosas del Monte María Cristina. La actividad contó con la participación, una vez más, de un grupo de internos del Centro Penitenciario que colabora con la ong gracias al programa "Reincorpora" de Fundación la Caixa. Los niños asistentes al encuentro de ayer, además de tomar una merienda, participaron en talleres de manualidades donde confeccionar corazones con mensajes solidarios. Desde hace cuatro años Melilla Acoge colabora con el programa "Reincorpora" de la Fundación la Caixa dirigido a la reinserción social de la población reclusa. El programa se divide en dos partes. La primera es la de formación, que en el caso de Melilla consiste en un curso de hostelería que se ha desarrollado en el restaurante La Muralla y que ha contado con la participación de 14 internos. La segunda parte, la de servicio a la comunidad que deben realizar los reclusos. Es en esta parte en la que los internos entran en contacto con Melilla Acoge.
Como el año pasado, la entidad melillense ha apostado por desarrollar con los internos un acto solidario al objeto de contribuir a dar respuesta a las necesidades que se detectan en la ciudad. Por ese motivo ayer se llevó a cabo la merienda solidaria en la Plaza de Menéndez Pelayo, donde se invitó a familias y niños melillenses a degustar una merienda y participar en talleres de elaboración de manualidades, a cambio de que donaran alimentos no perecederos que se harán llegar a las religiosas del Monte María Cristina, que a su vez los distribuirán entre aquellos que más lo necesitan.
Los asistentes a la merienda de ayer, degustaron café, zumos y dulces donados por la cafetería Bar Parnaso. Los niños que acudieron a la actividad de ayer, disfrutaron de distintas actividades, desde talleres de maquillaje a globoflexia. El objetivo, concienciar sobre que hay muchas personas que carecen de lo más básico, por lo que hay que cuidar lo que se tiene y no desperdiciar.
Isabel Torrente, coordinadora de Melilla Acoge realizó un balance muy positivo de la actividad, en especial porque ha permitido a los internos, muchos de ellos ya en libertad, poder demostrar que tras el periodo que han permanecido privados de libertad, han sabido aprovecharlo para apostar por su reinserción, formarse e iniciar una nueva vida. El curso de formación en hostelería desarrollado en La Muralla les ayudará a ello, y las prácticas que han realizado en cuatro cafeterías de la ciudad: Parnaso, Cafetería EL Barco, Zafiro y Cafetería Jana. Isabel Torrente señaló que en los cuatro años en los que viene funcionando el programa, han tenido una media de inserción laboral de cinco personas por año, lo que supone todo un aliciente. Agradeció Torrente a las empresas colaboradoras su contribución, y a los melillenses el que ayer se acercaran a la plaza de Menéndez Pelayo bien para donar alimentos o para realizar alguna contribución económica.
