Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

“¿Los jueces unos dioses? No me considero un dios, todo lo contrario, las puertas de mi despacho siempre están abiertas”

Ante la creencia de algunos que señalan que los jueces se creen dioses, el Decano de los Juzgados de Melilla ha declarado que "cada uno tiene su opinión, creo que depende de quien lo diga, pero yo no me considero un dios, todo lo contrario". Emilio Lamo de Espinosa ha significado que "hablo por mi experiencia personal: soy una persona que siempre tiene el despacho abierto, y cuando digo yo, también digo todos mis compañeros. No he visto a nadie que no sea de otra forma. Recibo siempre, no ponemos horario de atención al público, puede venir fulano, mengano o zutano, que seguro que lo recibo como estáis vosotros aquí ahora. Te lo digo de verdad. Eso de creerme más que nadie o tal, en absoluto, todo lo contrario" ha recalcado. El Magistrado-Juez ha afirmado que "yo creo que aquí hacemos un trabajo que es el que nos toca e intentamos ser lo más próximos posible. Otra cosa es que tu siempre tienes que tener también un punto de distancia para poder emitir una resolución desapasionada y lo más técnica posible, por muy bien o mal que te pueda caer una persona. Eso no te puede influir a la hora de dictar una sentencia. Independientemente de que en el trato personal intentemos ser lo más cercanos, próximos y corteses, y ponernos en la situación del otro, como no puede ser de otra manera. Y así en el trato en la sala también, por supuesto".

Ley de Segunda Oportunidad
En sentido, hay que destacar que en la XXIV Reunión Nacional de Jueces Decanos insistieron en que los jueces son ciudadanos y eso precisamente no liga con ser dioses. En este encuentro en Valencia abogaron por ejemplo por una ley de Segunda Oportunidad. "Hay situaciones que a nosotros nos toca resolver que no nos parecen justas. Imagínate un desahucio de una persona de más de 80 años con un nieto a cargo suyo y con una pensión mismísima que firmó en su momento una hipoteca con una entidad bancaria sin saberlo. Esta persona puede pagar una deuda pero lo que no puede hacer es pagar y perder el piso. Y tienes que enjuiciar con arreglo a eso: ¿Y qué haces? Es que la ley no te permite articular todas las formas posibles para que esa persona pueda tener esa segunda oportunidad, es decir que esa persona pague lo que pueda y lo que no. Oiga, no lo pague, y se hace una espera de tres años de quitas y esperas, que es por lo que nosotros abogamos. Pedimos que cambien la ley contando nuestra experiencia y lo que estamos viendo".

Emilio Lamo de Espinosa ha solicitado que se trate esta cuestión como una política de Estado de los tres grandes poderes. "Nosotros (el poder judicial) decimos lo que estamos viendo y los poderes ejecutivo y legislativo tomando las decisiones que ellos crean que deben tomar, de manera soberana y autónoma. Lo que no podemos hacer es decirles que esto funciona muy bien y que no tenemos ningún problema, porque eso no es así" ha reconocido.

Así ha explicado que "hay problemas y no queremos acudir a formas de decidir excéntricas porque nosotros tenemos que regirnos por la ley, no podemos saltárnosla ni decir cosas que no sean, pero lo que sí podemos hacer es decir: Oiga, tenemos este problema, creemos que este problema puede tener una solución y pedir que todos trabajemos juntos para salir en un plazo corto espacio de tiempo. Igual que se dictan leyes en días cuando se quiere, en esto que afecta a personas también se puede hacer, por eso insistimos en una ley de segunda oportunidad".

Lamo de Espinosa ha dicho que hay que primar a la familia sobre la persona jurídica. "¿Por qué? Porque observamos que en los procesos concursales, cuando son personas jurídicas, eso funciona correctamente, pero cuando es una persona física la que se declara en suspensión de pagos o de quiebra, la legislación no es accesible ni es transparente para esas personas. Queremos una ley transparente para que esas personas puedan afrontar una situación extrema. Que se prime a la persona sobre cualquier otra cosa, que se vea el caso particular. No tenemos que llegar a situaciones extremas porque la administración fuerce a vivir a una persona en una situación menesterosa pudiendo optar por otras situaciones más razonables y moderadas". "Es un campo muy bueno de trabajo" ha indicado por último el Magistrado-Juez sobre la llamada Ley de Segunda Oportunidad.

Loading

Mustafa Hamed

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€