La responsable Técnica del Área de Género del CERMI Estatal, la psicopedagoga Mercedes Pérez de Prada, apostilla que es necesario articular los mecanismos necesarios para que las mujeres con discapacidad puedan expresar su voz, que se den a conocer, que puedan participar de forma activa en la sociedad y en el propio colectivo al que pertenecen, en definitiva, "conseguir ser visibles y demostrar lo mucho que podemos aportar". Mercedes Pérez de Prada ofrece hoy, a las doce, en el Aula de Grados del Campus de la UGR en Melilla la conferencia titulada "La mujer en el ámbito de la discapacidad". Mercedes Pérez de Prada, responsable Técnica del Área de Género del CERMI estatal, es licenciada en Magisterio, en la rama de Educación Primaria, Infantil, al tiempo que estudió Psicopedagogía en la Universidad Villanueva, adscrita a Complutense. Mujer con discapacidad auditiva, lleva implante coclear, es técnica de apoyo al Área de Género y discapacidad en Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI).
- Hoy visita Melilla para ofrecer una conferencia titulada 'La mujer en el ámbito de la discapacidad'. ¿Qué busca transmitir?
- Quiero transmitir a la sociedad que más de la mitad de la población con discapacidad son mujeres y sufren un alto índice de discriminación múltiple. En la actualidad, para las mujeres con discapacidad hay un mayor riesgo de sufrir violencia de género, los puestos de trabajo que se ofrecen son de baja cualificación y/o peor remunerados; en general, hay una dependencia económica que impide el desarrollo normal en la sociedad y, lamentablemente, hay una escasa participación de las mujeres con discapacidad.
Creemos firmemente que las mujeres con discapacidad deben gozar de los derechos en igualdad de condiciones y deben tener un mayor y más fácil acceso a la justicia.
- Usted defiende que las mujeres con discapacidad deben gozar de sus derechos políticos en igualdad de condiciones. Ahora que se inicia el proceso en el que los partidos políticos confeccionan sus listas, ¿defendería una paridad o el establecimiento de cuotas por colectivos, o las dos cosas?
- Defendería las dos cosas. Es importante que haya más atención a esta realidad invisible y deben entender que las mujeres con discapacidad tienen los mismos derechos que las demás mujeres y, por ello, deben estar representadas en las mismas condiciones.
Estamos luchando para evitar la imposibilidad de que las personas con discapacidad puedan ejercer el derecho al voto en igualdad de condiciones con el resto de ciudadanas/os mayores de 18 años; y sobre todo que haya más accesibilidad a la información. Desde CERMI hemos creado un folleto donde se titula "Tienes derecho a votar, que nadie te lo quite". Deben ser informadas de sus derechos para que puedan tomar sus decisiones.
- Desde su experiencia personal y profesional, ¿qué considera que las personas con discapacidad pueden, tienen y deber aportar a la sociedad, y en especial ahora en los programas electorales?
- Son muchas las cuestiones que las personas con discapacidad pueden ofrecer a la sociedad: la sensibilidad y consideración hacia los problemas reales que rodean a todos los colectivos. Su experiencia, su lucha, su afán de superación, la búsqueda de la igualdad y la justicia para todos. Las perspectivas de una persona con discapacidad deben ser tenidas en cuenta y tienen que redundar en beneficio de todos.
- Desde todos los movimientos sociales se denuncia la doble victimización de las mujeres que además tienen una discapacidad. Sin que existan fórmulas que aporten soluciones reales a corto plazo, ¿es todo cuestión de educación o sólo un eslabón?
- La educación es muy importante, desde luego. El mundo de las mujeres con discapacidad está absolutamente olvidado por los medios de comunicación y siguen quedando al margen de todos los movimientos de derechos humanos, en una posición de clara desventaja en la sociedad.
Una solución a corto plazo es una necesidad urgente en la que se reconozcan verdaderamente sus necesidades e intereses a todos los niveles.
- La psicología popular propugna eso de que el orgullo personal ayuda superar cualquier barrera u obstáculo. ¿Cómo vive esa realidad una persona con discapacidad?
- En el día a día siguen existiendo infinidad de barreras en todos los ámbitos, como en la salud, empleo, maternidad, formación, etc. El orgullo y la dignidad pueden ayudar a seguir trabajando y luchando por esa igualdad pero, en muchas ocasiones, no es suficiente para poder derribarlas.
- Las personas con discapacidad o con distintas capacidades como defiende el movimiento CERMI, ¿consideran que sigue existiendo cierto paternalismo o protección malentendida dentro de las autoridades y la sociedad a la hora de tratar a una persona con discapacidad?
- Desde CERMI y nuestras organizaciones seguimos pidiendo tanto a las autoridades como a la Administración una mayor sensibilidad que afecta cada vez más a personas con discapacidad.
- ¿Las nuevas generaciones son conscientes del mundo que les rodea, y en especial del emergente movimiento de las personas con discapacidad?
- Aunque es verdad que ahora hay más información y formación que antes, la tecnología, dispositivos y las técnicas de apoyo han avanzado mucho pero son muy costosos y debería haber más subvenciones o ayudas, aun así, todavía existe un gran desconocimiento del mundo de la discapacidad.
- En esta época de crisis económica que viene lastrando a todo el país, las personas con discapacidad ¿se han visto más desprotegidas, olvidadas?
- Lamentablemente, como te he comentado antes, todavía seguimos muy olvidadas, somos un mundo invisible y desprotegido. Las barreras son muchas y nuestras necesidades también.
- Queda mucho camino por andar y muchos retos que conquistar. A corto plazo, ¿por qué apostaría? Y pensando en las mujeres con discapacidad, ¿qué es lo más urgente dentro de lo urgente?
- Efectivamente, muchos retos, muchos proyectos que tiene que hacerse realidad. Es prioritario dar más visibilidad a las mujeres con discapacidad, es decir, hay que darles la voz, conocer nuestros testimonios, erradicar la esterilización forzosa y la violencia contra las mujeres, debemos dar a conocer las situaciones de violencia que sufren las mujeres y niñas con discapacidad. Hay que promover y mejorar la calidad de vida de las mujeres y niñas con discapacidad ¡Juntas y juntos podemos poner el fin de la desigualdad que sufrimos! ¡Hay que seguir defendiendo nuestros derechos y tenemos que conseguir ser visibles y demostrar lo mucho que podemos aportar!
