El Melilla Baloncesto volvió a ponerse el mono de trabajo para preparar el partido de mañana ante el Peñas Huesca, en el Pabellón Javier Imbroda Ortiz. La plantilla regresó ayer por la mañana a los entrenamientos, tras haber disputado este pasado miércoles el encuentro de liga de la duodécima jornada ante el Ford Burgos, que acabó con una derrota contundente por 89-68. Pero si algo tiene esta Adecco Oro es que no da tiempo para lamentarse y pensar en el pasado, ya que mañana vuelve la competición, con la penúltima jornada de la primera vuelta y que llevará al decano a jugar ante Peñas Huesca, en el Javier Imbroda, a partir de las 19’00 horas.
En esta vuelta a la actividad, el equipo comenzó a trabajar en la sala de musculación de la instalación municipal. Una vez concluido el trabajo allí, el equipo se trasladó la pista de juego para realizar, junto al preparador físico del club, un trabajo regenerativo y de activación. La mañana concluyó con una suave sesión de tiro, en la que el equipo trabajó dividido en dos grupos, uno lo hizo con Alejandro Alcoba, en un lado de la pista, y Javi Muñoz con el otro.
Ningún jugador llegó con problemas del encuentro en El Plantío, por lo que toda la plantilla completó sin mayores problemas la sesión matinal.
Ayer por la tarde, Alejandro Alcoba volvió a citar a su plantilla para realizar un nuevo entrenamiento, este con un mayor calado táctico, para continuar con la preparación del importante partido de mañana ante el conjunto oscense del Peñas Huesca.
Hoy por la mañana, el conjunto de la Ciudad Autónoma se ejercitará por última vez antes del encuentro ante el cuadro peñista, con un nuevo entrenamiento de carácter técnico-táctico.
