Buscar
Cerrar este cuadro de búsqueda.
Logo de Melilla hoy

Peligro para la integridad física

“Un ejemplo claro de esto último lo vivimos ayer y por fortuna el inmigrante sólo le alcanzó el rostro al guardia civil, porque si llega a darle en un ojo, estaríamos hablando hoy de palabras mayores” Está visto y comprobado que las situaciones a las que tienen hacer frente a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en la valla cuando se producen avalanchas de inmigrantes no es mucho menos "moco de pavo". Ya hemos vivido muchos episodios violentos en la alambrada como demuestra el hecho de que en lo que llevamos de años 2014 hasta 39 agentes de la Guardia Civil han resultado heridos en la valla. Para saber del último afectado, basta con mirar el intento de salto registrado a primeras del viernes, cuando un agente resultó herido en la cara tras ser golpeado por un subsahariano con un garfio de los que usan para escalar la malla antitrepa. Otro suceso no menos violento fue el que se produjo hace unos meses cuando un sargento de la guardia civil que intentaba auxiliar a los subsaharianos para que descendieran de la alambrada con arnés, recibió un patada en la cabeza que le hizo perder el equilibro y caer desde una distancia de cinco metros de altura.

Así vemos que la presión a la que están sometidos los agentes en el perímetro fronterizo es demasiado grande porque no sólo tienen cumplir con su cometido de evitar que se violen a la fuerza las fronteras de españolas, también tienen que lidiar con la falta de comprensión de determinadas instituciones como la Unión Europea (UE), que deberían ser de las más comprensivas a la hora de valorar el esfuerzo de los hombres y mujeres que forman el Instituto Armado, en su tarea de salvaguardar la que acertadamente se vienen denominando como "frontera sur de Europa", porque parece ser que hay quienes olvidan este importante detalle.

Con sus actuaciones, la Guardia Civil intenta evitar que no se violente un territorio que forma parte de la UE y además lo hace en unas condiciones muy complicadas porque atrás quedaron los tiempos en los que los subsaharianos venían pacíficamente hasta la alambrada. Ahora lo siguen intentando de cualquier modo, pero a ello hay que añadir que recurren a la violencia y si no, que les pregunten a los 39 agentes que han resultado heridos este año.

Pero de esto no dice nada el nuevo comisario de Inmigración, Interior y Ciudadanía de la Unión Europea, Dimitris Avramopoulos. Ha anunciado que va a visitar Ceuta y Melilla y por el momento lo único que ha pedido a España es que investigue el "incidente" que se produjo el pasado 15 de octubre, cuando un joven inmigrante fue golpeado por agentes de la Guardia Civil mientras bajaba de la valla de Melilla a la que se había encaramado tras participar en un intento de salto junto a otras personas. No dice que este subsahariano opuso fuerte resistencia en lo alto de la alambrada antes de que fuera reducido porque el video de Prodein que ha servido para que Avramopoulos haga este pronunciamiento, no recoge esta parte.

El Ministerio del Interior ya giró una respuesta por escrito al diputado de Amaiur Jon Iñarritu sobre los mismos sucesos y alegó que aquel 15 de octubre en la valla de Melilla se puso "en grave riesgo la integridad física" de los agentes de la Guardia Civil y que se vieron "obligados a hacer uso" de sus defensas, como en otras ocasiones, "conforme a los principios básicos de actuación" que marca la ley. Según explica, "los inmigrantes llevaron a cabo intentos de agresión mediante el empleo de garfios y otro tipo de herramientas artesanales". Un ejemplo claro de esto último lo vivimos ayer y por fortuna el inmigrante sólo le alcanzó el rostro al guardia civil, porque si llega a darle en un ojo, estaríamos hablando hoy de palabras mayores.

Loading

Más información

Scroll al inicio

¿Todavía no eres Premium?

Disfruta de todas
las ventajas de ser
Premium por 1€