Han pasado tres años, seguimos caminando…
Hoy, día de los santos inocentes y de los inocentes sin ser santos,
hoy, tiempo privilegiado donde los niños grandes mezclamos añorada inocencia,
desbordamos sana amistad en este encuentro,
inspirados por el BOTIJO, la magna arcilla,
las fabes y el aunar de sentimientos… Estamos aquí en el Retiro sin retirarnos de las sendas de la vida con sus rectas y sus curvas, la vida,
No todo, amigos es gresca y jolgorio, risa sana, lagrimicas contenidas,,
pues no nos podemos evadir de una realidad con múltiples caras, tantas escondidas,
contrastes de lloros y alegrías,
…como la vida misma, la vida que endurece y deposita,
alforjas de dulzura por liberar, entendimiento, aproximación, complicidad, ,
luces de blancura que iluminen el infinito que sigue nuestro llegar…
Hoy, en esta posada del retiro, Benisidel presente, Asturias querida, próxima, cercanísima,
Melilla y sus botijos sienten el transcurso en este presente de armonía y humildad,
el valor del afecto sin fronteras y el aprecio a esa madre tierra,
a ese cielo que nos espera,
el recuerdo de esos seres queridos,
sintiéndose el BOTIJO sencillo y noble, protagonista, príncipe querido, botijeros
PRESENTE!!!,
identificados con su ser y sus valores, un pasado proyectado, un objeto
que apreciamos y sentimos tan adentro,
BOTIJO , botijeros, esta Peña ejemplar,
que mira al futuro
arcillando sus principios,
botijeando a sus próximos, a mi gente…
Feliz día, fabada pa dentro
y los estómagos calientes
Pericassi ( a mis botijeros)
Pies de foto:
El autor del artículo, Pedro Gallardo, con su esposa Mari Carmen Morales
Juan José Bartomeu (el cocinero de la fabada) con asistentes
Un grupo de féminas que disfrutaron de la III Fabada Botijera
