Arrastrando los estragos de un traicionero resfriado, el joven Álvaro Ruiz no oculta la alegría que le supone haberse alzado este año, el de la quince edición, con el primer premio del certamen de Cantautores Ciudad de Melilla. Era la segunda ocasión en la que tomaba parte en el concurso melillense que goza de renombre en el círculo de la canción de autor en nuestro país. Con los tres mil euros del premio afirma que o bien se compra una nueva guitarra para trabajar en estudios de grabación o grabar un disco. Lo cierto es que el año que viene volverá a Melilla, donde ofrecerá un concierto en la nueva edición del concurso y su deseo es poder hacerlo con su primer disco. Álvaro Ruiz, que reconoció no estar muy acostumbrado a las entrevistas, afirmó que lo suyo es subir al escenario y cantar. En cuanto al haberse alzado este año con el primer puesto del concurso de cantautores, señaló que estaba "muy contento", aunque apostilla que era algo que no se imaginaba que pudiera pasar. "Fue todo una sorpresa", reconoció.
Afirma que el nivel del concurso ha sido muy alto, "muy variado" en cuanto a tendencias, gracias sobre todo a que cada artista ha podido hacer lo que mejor sabe. "Me ha gustado mucho el concurso. Lo he visto muy bien, muy variado, y lo que más, el que haya sido tan distinto", porque cada uno ha podido expresarse con las formas y ritmos que ha considerado más oportuno.
Concurso
Es la segunda ocasión en la que este joven sevillano participa en el concurso melillense que ha cumplido su edición número quince. Si se decidió el año pasado fue porque "muchos compañeros me lo habían recomendado, me decían de apuntarme porque me lo iba a pasar bien y que iba a conocer a mucha gente". Cuando así lo hizo, descubrió que fue una de sus mejores decisiones. "El año pasado lo pasé increíblemente bien, desde la magnífica habitación de hotel, a los compañeros tan estupendos con los que compartí ese fin de semana, además de todas las canciones y los estilos que descubres", afirmó. Por eso mismo volvió este año.
'Guitarra mía', que fue la premiada, y 'Ritmo y copas', fueron los dos temas con los compitió en el Kursaal. ¿El motivo de su elección?, que quería hacer una actuación algo "más flamenco que el año pasado, y por eso escogí una que es una bulería y la segunda que es una colombiana". Álvaro Ruiz lo tiene claro, el "flamenco no ha muerto, y hay que reivindicar lo propio". "El flamenco te permite jugar mucho, porque está abierto a muchas cosas".
Destacó también del certamen de este año el que haya habido una mayor participación de cantautoras que el pasado año. Apuesta por potenciar a las mujeres, "hay que ponerse las pilas".
Del nivel de las participantes, dijo que no tenían nada que enviar a los compañeros masculinos y que de hecho una de las que más le gustó fue la melillense Ana María Catalá, "que me encantó". Manifiesta este joven cantante y compositor que concursos como el de Melilla son necesarios. Su celebración permite a los artistas darse a conocer. "Son necesarios que se celebren porque es una forma de ayudar a los músicos".
Premio
En cuanto al uso que dará a los tres mil euros del premio, dijo que baraja "varias ideas". "Una sería comprarme una guitarra en condiciones para trabajar en estudio, y otra, grabar un disco. A ver si puedo venir el año que viene con mi disco bajo el brazo. Una de las cosas que más me gusta del concurso es eso, que el año que viene voy a volver a Melilla". Afirma que ya tiene en mente las canciones que incluiría en ese trabajo, todas ellas con un toque flamenco, porque dice que el flamenco se ha convertido hoy en día en algo universal.
El sevillano Álvaro Ruiz Alcántara se alzó con el primer premio de esta quince edición del certamen de cantautores melillense y los tres mil euros del premio. El segundo fue para Jesús Zumaquero; el tercero, para la granadina Laura Sáez; el cuarto para Carlos Llanes, y el quinto, para Carlos Martín. Se concedió un premio de 1.100 euros al melillense mejor clasificado, que recayó en Ana María Catalá.
