El delegado del Gobierno, Manuel Céspedes, se autoeximía de responsabilidades en un nuevo caso de falsificación de documentos, éste referido a carnés de identidad y con un ex comisario del Cuerpo Nacional de Policía como principal acusado. Céspedes aseguró que su el director del periódico "El Eco" de Nador disfrutó del DNI provisional pese a su residencia marroquí, no fue como consecuencia de una irregularidad, sino como respuesta a los informes favorables emitidos tanto por la policía como por el Ministerio de Justicia.
El personal de mantenimiento de Binter en Málaga alcanzaba un acuerdo con la compañía, con lo que desaparecía la amenaza de dejar a Melilla incomunicada por aire, aunque sí que había padecido importantes cancelaciones en los días previos.
