A lo largo del año 2014 el Punto de Encuentro Familiar abrió un total de 17 nuevos expedientes, lo que supone un aumento del número de divorcios y separaciones conflictivas en Melilla. No obstante, en la mayoría de los casos, el centro funcionó como lugar de recogida y entrega de los hijos para que el ex cónyuge no custodio pueda cumplir con su régimen de visitas. Creado en 2006, desde febrero de 2012 el Punto de Encuentro Familiar se encuentra bajo la dirección de la Consejería de Bienestar Social y Sanidad, que lo dotó de un reglamento de funcionamiento en el que se prima siempre el interés de los menores. En estos últimos doce meses, en el Punto de Encuentro Familiar ubicado en los bajos de la urbanización Lo Güeno, se han abierto 17 nuevos expedientes familiares, la mayoría derivadas por el juzgado, y que sumados a los ya existentes arrojan un total de 63 expedientes vivos. Esta cifra pone de manifiesto que las cifras de divorcios y separaciones contenciosas no han hecho sino aumentar en la ciudad.
La demostración más palpable de ello es cuando se entra a conocer la modalidad de las visitas realizadas en el centro. Si en 2012 eran 11 los casos de recogida o entrega del hijo para permitir la visita del otro progenitor, en 2014 la cifra se elevó a 53; y frente a las 3 visitas tuteladas o supervisadas de 2012 en el propio centro, se ha pasado a 13.
De los 63 expedientes en activo en estos momentos, 47 de ellos incluyen régimen de visitas y los 33 restantes, o están pendientes de iniciar las visitas o se encuentran en suspenso. En 2014 se ha trabajado con un total de 54 expedientes y se han elaborado 17 nuevos. En este año recién concluido, en el Punto de Encuentro se han atendido a 2.014 personas.
Objetivos
El Punto de Encuentro es un espacio neutral que favorece las relaciones entre el niño y sus familias cuando el ejercicio del derecho de visitas se ve interrumpido o es de difícil cumplimiento. Son tres los objetivos que buscan: favorecer el cumplimiento del derecho fundamental del menor a mantener la relación con ambos progenitores para su buen desarrollo psíquico, afecto y emocional; prevenir situaciones de violencia en los regímenes de visitas conflictivas; y orientar y apoyar a los padres y familiares para que consigan la autonomía necesaria en el ejercicio de la copaternidad sin depender de un servicio que está concebido como algo transitorio hasta que se encauce las relaciones familiares.
El régimen de visitas lo establece el juzgado correspondiente y para evitar el denominado "síndrome de alienación parental". En estas instalaciones se llevan a cabo tres tipos de intervenciones. La primera es la de recogida y entrega del menor por parte del progenitor custodio al otro padre y, en este caso, las visitas se desarrollan fuera del centro. El segundo tipo de intervenciones permite que las visitas se realicen dentro del centro.
En tercer lugar se encuentra la visita tutelada, a realizar dentro del centro donde un profesional la supervisa. El Punto de Encuentro tiene como principio inspirador básico el respeto, la promoción y la defensa del interés superior de los niños y adolescentes y la protección de sus derechos en orden a garantizarlos.
