El entrenador melillense felicitó a su cuerpo técnico “por el trabajo que realizamos a lo largo de toda la semana, y especialmente al doctor Luis Segura, al fisioterapeuta Alejandro Ríos y al preparador físico Miguel Martínez Duarte, que estuvieron trabajando casi 24 horas al día para recuperar a los jugadores que estaban tocados”. También quiso felicitar a sus hombres “por ser capaces de trasladar al partido todo lo que trabajaron durante la semana”. El entrenador del Melilla Baloncesto incidió en que el encuentro del pasado viernes empezó “muy igualado, incluso con un Oviedo dominando el partido y nosotros muy precipitados en ataque. Esto duró hasta que Laso y Wright comenzaron a jugar situaciones de poste bajo que nos permitieron abrir las primeras brechas”.
Ya en el segundo cuarto, “desde la defensa y el dominio del poste bajo crecimos mucho y nos posibilitó abrir las primeras rentas importantes en el marcador”, aseguraba Alejandro Alcoba, quien también cree que en el tercer acto, “gracias al gran acierto exterior”, rompieron definitivamente el choque. “Es verdad que sufrimos ante un equipo que no estuvo muy acertado en el tiro y nos castigó durante varios tramos del encuentro con el rebote ofensivo”, apuntó. En cuanto al último cuarto, consideró que los suyos se dejaron llevar y jugaron con el resultado.
En resumidas cuentas, el entrenador del decano no tenía dudas al calificar de “muy bueno” el partido realizado por sus pupilos, “tanto en defensa como en ataque”, expresando su deseo de que “la afición disfrutase y se reencontrase con el equipo”. Además, espera que este choque ante los ovetenses pueda haber servido “para ilusionarnos y para pensar que podemos optar por cosas más importantes”, resaltó.
