El Gobierno central salió ayer en defensa del coronel jefe de la Guardia Civil de Melilla, Ambrosio Martín Villaseñor, imputado en una investigación abierta por el Juzgado de Instrucción número 2 de nuestra ciudad por devoluciones en caliente de inmigrantes en la valla. Lo hizo en una respuesta publicada ayer en el Boletín de las Cortes, en la que recordaba que el coronel “está imputado, que no procesado ni condenado”. Según el Gobierno, esta imputación se debe a “una cuestión de carácter técnico de interpretación de la aplicación de una norma, es decir, de la legislación vigente”. Asimismo, recuerda que “la situación de imputado no conlleva, necesariamente, la suspensión de funciones, que en la Guardia Civil es materia reglada por la Ley 42/1999”.
Un coronel como jefe
El Gobierno respondió así a una pregunta escrita presentada por el diputado socialista Antonio Trevín,quien quería saber “las razones por las que un coronel sigue mandando en un destino previsto para un empleo inferior en la Comandancia de la Guardia Civil en Melilla”. Sobre esta cuestión, el Gobierno responde que “la dotación de Jefe de la Comandancia de Melilla es del empleo de Coronel, empleo que ostenta su titular, como en otras muchas provincias de España”.
