El contrato marítimo que garantiza las líneas de Melilla con Málaga y Almería superó ayer la segunda 'bola de partido' frente a la plataforma empresarial, social e institucional creada en Motril para defender la línea marítima entre la localidad granadina y nuestra ciudad. La Audiencia Nacional ha acordado levantar la suspensión provisional de la adjudicación del contrato marítimo que había pedido la semana pasada la plataforma motrileña ante este tribunal como “medida cautelarísima”. Con esta decisión, la Marina Mercante tiene vía libre para seguir adelante con el proceso de adjudicación. En declaraciones a MELILLA HOY, el viceconsejero de Turismo, Javier Mateo, explicó que la Audiencia Nacional expone en su resolución los mismos argumentos que esgrimió la Abogacía del Estado en representación de la Marina Mercante, y que también defendía la propia Ciudad Autónoma.
Así, la Audiencia Nacional alega en su resolución que dejar de garantizar las líneas de interés público que conectan de forma histórica Melilla con Málaga y Almería supondría “un perjuicio grave, actual e inmediato” a los intereses generales, habida cuenta que estas rutas son empleadas por medio millón de personas al año.
Por el contrario, lo que plantea la plataforma de Motril son “daños hipotéticos” a la economía de aquella comarca en caso de que desapareciera la ruta marítima que tienen con Melilla, habida cuenta que “parte de la presunción de que la línea privada cerrará al no poder competir con las otras líneas”.
De esta manera, la Audiencia Nacional aclara que no pone en duda que la actividad económica que genera la conexión marítima Melilla-Motril no sea “relevante” para la provincia granadina, pero insiste en que se trata de una hipótesis y frente al daño que sí se produciría interrumpiendo las comunicaciones de Melilla con Málaga y Almería.
Además, la Audiencia Nacional establece cierta prioridad a las líneas de interés público porque Málaga y Almería son las ciudades “más importantes en población, nivel de servicios y nudos de comunicación” que Melilla tiene más cerca. Por ello, “no es arbitrario” el mantenimiento de estas líneas mediante el contrato público que está adjudicando el Ministerio de Fomento por un periodo de dos años y un presupuesto máximo de 25 millones de euros.
La plataforma motrileña tiene ahora cinco días para presentar un recurso de reposición ante la sección cuarta de la Sala de lo Contencioso Administrativo de la Audiencia Nacional. Por lo pronto, tendrá que pagar las costas que ha generado la interposición de esta medida cautelarísima, que ha tenido suspendido una semana el procedimiento de adjudicación del contrato marítimo.
“Un poco de color”
Marina Mercante podrá, a partir del lunes, seguir adelante con la adjudicación, que se había quedado en la apertura de los sobres con la oferta económica. Ahora será el momento en que pedirá a las tres navieras que se han interesado por el concurso, Trasmediterránea, Naviera Armas y Baleària, que justifiquen cómo podrán prestar el servicio con las grandes rebajas que han llevado a cabo respecto al presupuesto.
Mateo cree que la semana que viene este asunto “empezaremos a verle un poco de color”, aunque lamentó “lo que está costando” sacarlo adelante porque entre unos y otros “no dejan de poner piedras en el camino”. Se refería así a la plataforma motrileña, pero también a los partidos de la oposición de Melilla, cuya acción ha provocado un retraso en la adjudicación del contrato marítimo que está ocasionando ya perjuicios.
No en vano, explicó que el miércoles se reunirá con los operadores, que tienen “bloqueadas” en las ventas de billetes de mayo, época de comuniones, porque Trasmediterránea y Naviera Armas solo tienen disponibles hasta el 12 de abril a expensas de la adjudicación del contrato marítimo.
Por ello, aunque dijo que no se puede estar contento ante un panorama así, sí celebró que la Audiencia Nacional haya levantado la suspensión, que es lo que la Ciudad deseaba.
