El pasado sábado, y a pesar del día un tanto desapacible, 60 socios y simpatizantes de la Casa de Melilla en Barcelona, efectuaron una visita cultural a la vecina población de L'Arboç, situada a 60 kilómetros de Barcelona, y en la que está ubicada una réplica de la Giralda de Sevilla.
Según informan desde la entidad que preside Rafael Vega, este singular edificio fue promovido por Joan Roquer i Marí después de su viaje a Andalucía, donde se entusiasmó con la arquitectura califal, la cual quiso reproducir miméticamente en su residencia. La obra se realizó entre 1877 y 1889 y fue dirigida por él mismo. Los elementos más destacados son la reproducción de la Giralda de Sevilla, a escala 1:2, que se ha erigido en uno de los más emblemáticos del pueblo. En el conjunto hay también una réplica del Patio de los Leones de la Alhambra de Granada y del Salón de Embajadores del Alcázar de Sevilla.
Todos los elementos decorativos, así como los materiales utilizados, siguen fielmente los modelos originales, a partir de les fotografías hechas durante su viaje a Andalucía.
Y sucedió que Joan Roquer i Mari, Juanito como era conocido por el pequeño de la familia y además artista, fotógrafo y dibujante, todo lo que su familia no esperaba de él, pero dado que era el primogénito, solventaron la situación casándolo con una señorita de la burguesía catalana. La pareja ya casada, aprovechó los dibujos y fotografías que Juanito había hecho en sus múltiples viajes por el sur de la península, y construyeron su casa veraniega en la vecina población de l'Arboç, provincia de Tarragona, aunque su residencia habitual estaba en Barcelona capital.
