La noche del Miércoles Santo está dedicada a la Real Cofradía y Hermandad Franciscana de Nuestro Padre Jesús Nazareno y María Santísima de los Dolores, la cofradía más antigua de Melilla que tiene previsto incluir en el recorrido de esta noche, un homenaje a su santo titular, el Cristo Nazareno, con ocasión del 350 aniversario de su primera salida procesional documentada. Entre las novedades de este año destaca que el Cristo lucirá una nueva túnica bordada en oro por dos hermanas cofrade, así como la Cruz de Guía que se estrenó en la salida procesional del Lunes Santo, junto a la Sentencia. Ilusión, mucha ilusión y ganas de trabajar no les faltan a los integrantes de la Cofradía del Nazareno, la más antigua de la ciudad, tal como reconocía ayer su vice hermano mayor, Marcelo Nogales, y es que hasta altas horas de la madrugada de hoy estuvieron liados con los preparativos para que la estación de penitencia de este Miércoles Santo se desarrolle de la mejor manera posible. Apenas si había finalizado la salida procesional de La Sentencia cuando ya comenzaron con los preparativos del Miércoles Santo en el que el Nazareno y la Virgen de los Dolores saldrán a la calle.
Estos preparativos llevan su tiempo, desde vestir a las tallas, al complicado montaje del palio del paso mariano que debe realizarse manualmente, el anclaje de las tallas y la colocación del adorno floral que les llevará hasta esta misma tarde. Un grupo de 25 cofrades, capitaneados por su hermana mayor, Francisca Muñoz, se vienen dedicando en cuerpo y alma a estas labores para que todo luzca a la perfección y más este año, en el que el Nazareno celebra el 350 aniversario de su primera salida procesional documentada.
Marcelo Nogales indicó que a lo largo del recorrido procesional de esta noche se ha previsto un momento especial con el que celebrar este aniversario. No concretó si será al principio, durante o al final del recorrido, aunque todo hace pensar que será al final, aprovechando que regresará en plena madrugada del día 2 de abril, que es cuando se cumple este aniversario. Apuntó también Marcelo Nogales que están preparando una salida procesional muy especial con ocasión de esta efeméride y que podría celebrarse a finales de mayo o comienzos de junio.
Volviendo a la salida de esta noche, confía que pueda repetirse el éxito del Lunes Santo, porque "fue una procesión extraordinaria e insuperable; todo salió bien, desde los portadores a la música y los penitentes, hasta los niños se portaron bien". El Nazareno hará su salida procesional 350 luciendo además una nueva saya, bordada por María Teresa Nogales Mona y Carmela Bello Sánchez, que han dedicado innumerables horas en esta operación, utilizando distinta técnicas, desde el bordado picado, fondo de cordel, de hilo tendido o de fantasía con canutillo, todo con hilo de oro de torsión muy ligera para los contornos, cordoncillo de oro e hilo fino DMC de color amarillo.
Procesión
El Nazareno será portado en un trono más pequeño que el original, el mismo que vienen utilizando en los últimos años y que precisa un menor número de portadores. No obstante, desde la Cofradía se anima a participar a toda aquella persona que esté interesada en acompañar al Señor de Melilla. El paso de la Virgen está completo, con su cuadrilla de portadores que procesionará a paso sevillano, con sus chicotás tradicionales al ritmo de la música.
A las ocho y media de la noche de este Miércoles Santo se ha previsto que los santos titulares de la Cofradía del Nazareno salgan en procesión desde la Plaza de Toros. El primero en iniciar su estación de penitencia será el Nazareno para dar paso, minutos después a la Virgen de las Lágrimas.
El deseo, que todo salga a la perfección y que los melillenses "nos acompañen en el recorrido y en el momento especial de la recogida, como nos ocurrió el lunes con La Sentencia". Los melillenses siguen con devoción los pasos de la cofradía fundada con la llegada de Pedro de Estopiñán en 1497. Esta hermandad representa, por tanto, la historia viva de la religión cristiana de Melilla desde la fundación de este pequeño rincón africano como una ciudad española, lo que le permite ser la cofradía de todos los melillenses aunque hoy, a diferencia de lo que ha ocurrido durante tantos siglos de historia, ya no sea la única de toda la ciudad.
